J. A. V., de 26 años, se sentó ayer en el banquillo de los acusados por agredir presuntamente a su padre después de que este se negara a darle una cerveza. El imputado negó los hechos, pero la Fiscalía mantuvo la acusación y solicita una condena de 8 meses de prisión, más la privación del derecho a la tenencia y porte de armas durante 2 años y 6 meses.

La supuesta agresión habría sucedido a las 16.30 horas del 30 de septiembre, cuando el acusado se encontraba en el domicilio del progenitor en Paderne de Allariz. Molesto con su padre porque se negó a darle una cerveza, el joven presuntamente reaccionó de una forma agresiva y violenta. Se habría abalanzado contra su familiar, empujándolo contra la pared y después contra el pasamanos de la escalera, aunque no llegó a causarle ninguna lesión.

El fiscal calificó los hechos como un delito de maltrato familiar. Propuso una pena de 60 días de trabajos en beneficio de la comunidad en el supuesto de que el joven aceptara la responsabilidad. Sin acuerdo, la juez dictará sentencia.