La presidenta de la Federación Provincial de Mulleres Rurais As Burgas, Paz Álvarez González, asume el reto de liderar el cambio de estatutos de las 20 asociaciones de este tipo que hay en Ourense y de la provincial para que pasen a denominarse "Asociación de Mulleres e Familias Rurais", en las que podrán integrarse también los hombres. El cambio, que es pionero en Galicia, tiene "numerosas ventajas". La presidenta lo resume en una sola frase: "Si la mujer quiere reivindicar sus derechos, tiene que participar la familia entera: el hombre no puede quedar excluido". Y agrega: "De poco vale que la mujer quiera tener sus derechos, si el hombre no está preparado y colabora para que así sea".
La iniciativa es prometedora, pero va a tener que pagar un importante peaje, debido a que las asociaciones de la provincia de Ourense perderían más de 25.000 euros, al comprometer las subvenciones que reciben en estos momentos de Igualdade, en el caso de que la afiliación de hombres supere el 10%.
Pese a este problema, Paz Álvarez pretende culminar el proceso de refundación o cambio de estatutos del asociacionismo rural en la provincia de Ourense. "Cuando se incorporan los hombres, funcionan mucho mejor las asociaciones, porque no ponen trabas y es muchísimo mejor. Cuando se realiza una charla sobre derechos, es imprescindible que asistan los hombres, para que se convenzan de que tiene que ser así".
De forma anecdótica, Paz Álvarez recuerda que Extensión Agraria realizaba charlas formativas sobre ordeño higiénico del ganado, y se encontró con el problema de que solo acudían los hombres. "Como las mujeres eran las que hacían el ordeno, no conseguíamos nada". Por lo tanto, al final optaron por hacer charlas para las mujeres. En este caso, considera que es imprescindible que asistan los hombres, para lograr mayores avances. "Si el hombre no participa, no colabora, no ayuda, no hacemos nada. La formación tienen que ser en común".
Otra de las ventajas que representa el cambio, es que con la incorporación de los hombres se incrementa el potencial de la asociación, al pasar de las 1.200 afiliadas que hay en la provincia a 2.000 o más.
El proceso de cambio de estatutos, para convertir las 20 Asociacións de Mulleres Rurais y la Federación Provincial en Asociacións de Mulleres e Familias Rurais se iniciará en el mes de enero. La presidenta explica que "hay que hacerlo entidad por entidad", para efectuar el cambio completo. De hecho, en estos momentos "ya hay una asociación nueva que ya se llama así: Asociación de Mulleres e Familias Rurais". Pero a las demás, como ya estaban de antes, hay que modificarles los estatutos. "En el primer trimestre de 2017 vamos a intentar cambiarlas todas", explica la presidenta de la Federación.