La anterior concesionaria del servicio de limpieza de edificios municipales, PAU -del grupo Vendex-, está dispuesta a llevar al juzgado al Concello por mantener a la empresa Seralia. El gobierno local adoptó el pasado jueves la decisión de dejar desierto el concurso de adjudicación, en función de los informes técnicos que esgrimían el incumplimiento de una de las cláusulas del pliego, lo que lleva consigo que Seralia siga realizando los trabajos en precario.

El gobierno local había tenido que retomar todo el proceso de adjudicación, hace algo más de tres años, como así lo ordenaba una sentencia judicial firme, en primera instancia del Juzgado Contencioso Administrativo y ratificada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), debido al incumplimiento de las condiciones económicas, a raíz de un recurso presentado por PAU. La misma sentencia también ordenaba la exclusión de la empresa ganadora, Seralia, del proceso de adjudicación, que ahora acaba de ser declarado desierto.

El gobierno municipal justifica la decisión de mantener a la empresa Seralia en base a los informes emitidos por los técnicos. Por su parte, los representantes legales de PAU, además de no tener conocimiento oficial del acuerdo adoptado de dejar desierto el concurso, solicitarán toda la documentación relacionada con el mismo. Pero advierten que la decisión llevará consigo iniciar un nuevo proceso judicial.

Es por eso que estudian denunciar a la junta de gobierno por la vía penal, por un presunto delito de prevaricación pasiva, y argumentan que la sentencia del TSXG "es muy clara y, sobre todo, muy fácil de interpretar". Y dejan claro que con el único procedimiento judicial que se inicie "la gran beneficiada es la empresa -Seralia- que nunca debió ganar el concurso", en alusión directa a lo que se plasma en la sentencia.

Además, advierte que el nuevo concurso que tiene previsto abrir el Concello para la adjudicación del servicio se puede prolongar por espacio de seis meses, durante los cuales Seralia mantendrá el servicio.

El alcalde, Jesús Vázquez, al dar cuenta del acuerdo posterior a la reunión de la junta de gobierno, esgrimió el argumento de que no se puede contratar a otra empresa, ya que de lo "contrario el concello cometería una ilegalidad". Una cuestión que asegura le expusieron los propios técnicos municipales.

Desde el grupo Vendex se explica que no se trata de realizar una nueva contratación, sino de que la concesión del servicio vuelva a la que estaba antes de que se adjudicase a Seralia el servicio, que era PAU, y que en el concurso anulado había sido la segunda mejor oferta.