Un conductor de 29 años y vecino de Ourense tendrá que enfrentarse a un juicio rápido por un positivo en alcohol a partir de una prueba obtenida después de haberse saltado un control y ser seguido por la Policía Local por varias calles de la ciudad la madrugada del domingo.

La Policía Local llevaba a cabo un control de alcoholemia preventivo en la calle Pena Trevinca, en la zona de pubs, cuando pasadas las cuatro de la madrugada, este joven que se aproximaba conduciendo un Citroën Saxo evadió el control, dándose a la fuga. Una patrulla lo siguió interceptándolo al otro lado del casco histórico, a la altura de la parada de taxis de la Alameda, en la plaza de Bispo Cesáreo.

Una vez interceptado, los agentes le practicaron el correspondiente test de alcoholemia, en el que arrojó un resultado positivo, triplicando la tasa máxima permitida. Por estos hechos, se instruyeron diligencias judiciales.

La Policía Local dio a conocer ayer este caso y señaló que "saltarse un control de alcoholemia ha traído como consecuencia para este conductor la citación para un juicio rápido".