La investigación iniciada hace dos años y cinco meses a partir de dos robos sucesivos en una tienda de telefonía móvil de la céntrica calle Santo Domingo de Ourense ha sido larga pero fructífera. La Policía Nacional cerró el operativo el pasado lunes con un balance de 14 detenidos, cuatro imputados y siete investigados a lo largo de todo este tiempo, así como la recuperación de la práctica totalidad de los 70 terminales sustraídos. Un trabajo ingente y muy laborioso por la complicación de localizar a todos los compradores ya que gran parte de los dispositivos se comercializaron después del robo a través de tres tiendas de telefonía de segunda mano y reparaciones de móviles cuyos propietarios figuran entre los catorce detenidos, todos ellos ourensanos.

El primero en caer fue el presunto autor material de sendos robos con fuerza en la tienda ocurridos los días 2 y 7 de abril de 2014. El arresto se produjo dos meses después de los hechos y el sospechoso ingresó en prisión. Fuentes policiales confirman que sigue en esta condición por este y otros hechos delictivos.

Los dos robos se realizaron durante la noche y el botín resultante fueron 70 terminales valorados en 19.927 euros y 300 euros que había en la caja registradora. El método utilizado en ambas ocasiones es el mismo y consistía en romper la puerta de entrada para llevarse los teléfonos de los expositores y el metálico de la caja.

Desde el momento en el que la propietaria del establecimiento denunció estos hechos, el grupo de Investigación (UDEV) de la Comisaría Provincial de Ourense recabó información sobre lo sucedido en el local desvalijado, y tras la inspección ocular realizada por el grupo de policía científica, se desarrollaron las pertinentes investigaciones. La colaboración policial dio como resultado la detención por parte de la brigada provincial de seguridad ciudadana de un individuo que portaba en el interior de una mochila cuatro terminales de móvil que, como se pudo comprobar con posterioridad, formaban parte del lote de los 70 teléfonos sustraídos. En el transcurso de la investigación se pudo identificar y detener a un cómplice del robo, y a una serie de personas que habían adquirido los terminales sustraídos. Diez fueron vendidos de forma directa a particulares y los otros 60 a tres tiendas de telefonía de segunda mano.

En total, los agentes tomaron declaración a 16 personas, y detuvieron a trece individuos, siendo tres de ellos los titulares de las tres tiendas. Cuatro personas más han sido imputadas pero no detenidas por un presunto delito de receptación, y otros siete continúan en el caso como investigados por este mismo tipo delictivo.

Según ha informado la Comisaría de Ourense, la mayoría de los encartados figuran con antecedentes policiales. El grupo de investigación ha entregado los terminales recuperados en calidad de depósito a la responsable del establecimiento, dándose por finalizada la investigación el pasado lunes.