La afluencia fue masiva ayer hacia el santuario de Os Milagros, en el que presidió la misa de doce el arzobispo de Belcastro y secretario de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, José Rodríguez Carballo, natural de la localidad Lodoselo (Sarreaus), que se encuentra muy próxima, por lo que ha constituido una de las referencias que ha influido más en su vocación religiosa, desde edades muy tempranas. El rector del santuario, José Manuel Villar Suárez, confirma que ayer ha recibido en torno a 70.000 peregrinos, según fuentes de la Guardia Civil.

Rodríguez Carballo destacó que el santuario de Os Milagros es uno de los que tiene mayor afluencia de Galicia, junto al del Cristo de la Victoria, después de Santiago de Compostela. El obispo de Belcastro también reconoce este templo como "el gran pulmón de Galicia, y especialmente de esta diócesis de Ourense". Carballo indicó ante los devotos que siempre que viene a Ourense, siempre que viene a España, "la visita al santuario de Os Milagros es obligada". Explicó que alguna vez que había llegado de noche, por Ourense, no ha podido pasar sin pararse a rezar un Avemaría, aún con el santuario cerrado.

El arzobispo de Belcastro anima a la participación en el sínodo diocesano, que ha comenzado en la novela de Os Milagros, y lo puso bajo la advocación y la protección de la Virgen María, intentando que "se favorezca la nueva evangelización, que tanto desea el Papa Francisco".

En el transcurso de la eucaristía, realizaron una procesión, que salió del santuario por el pasillo central y dio la vuelta a la explanada del templo.

Rodríguez Carballo siempre va en el mes de agosto con su familia al santuario de Os Milagros, el día de Santa Clara, para celebrar su cumpleaños.

El rector del santuario, José Manuel Villar Suárez, reconoce que la apertura de la Puerta Santa "ha sido un atractivo más" de la novena. Ha recibido a miles de peregrinos en estos días, que han ganado las indulgencias plenarias, al cumplir las cuatro condiciones que requiere: confesar las faltas y pecados, comulgar, orar por las intenciones del Papa y rezar el Credo.

Contra todo pronóstico, el rector del santuario explica que el promedio de edad de la gente que pasa por la puerta santa cada mañana para ganar las indulgencias plenarias es "bajo, de unos 45 años". Se trata de "padres de familia, que vienen a la novena". Pero la edad oscila entre los seis años de algunos alumnos de primaria, a noventa. El día de la tercera edad, visitaron el santuario en torno a mil personas mayores.

La Puerta Santa permanecerá abierta hasta el mes de noviembre, en el que procederá a su clausura el obispo, Leonardo Lemos.