El reto era complicado. Tras cuatro años de silencio, la Mostra de Viños da Ribeira Sacra Ourensá lo ha roto este fin de semana, para celebrar su quinta edición. Sin embargo, finalmente la participación pareció acompañarles ayer. "Con respecto a otras ediciones está claro que la afluencia no es la misma, evidentemente, sobre todo si comparamos con las últimas", explicaba la alcaldesa de Castro Caldelas, concello que alberga el evento, Sara Inés Vega. "Ha habido un parón y eso es un handicap, además de que estamos a finales de verano, pero sí podemos asegurar que hemos alcanzado el nivel de la segunda edición, y que hemos superado a la primera", explicaba la edil.
Esta fiesta del vino comenzaba ayer a mediodía en el castillo del concello con el pregón del periodista alaricano, Xosé Manuel Piñeiro. Una vez inaugurada esta Mostra, el público pudo empezar a disfrutar de los puestos que las once bodegas participantes pusieron a su disposición, donde se ofrecían caldos mencía, treixadura, merenzao y godello. En cuanto a los niños, la Praza do Prado, se llenó de actividades solo para ellos: "La verdad es que han tenido muy buena aceptación y permiten a los padres disfrutar relajados de la Mostra", explicaba Vega, que se mostraba "satisfecha con el discurrir" de la primera jornada. "La gente está respondiendo y para nosotros es muy importante ser el escaparate de vinos situados en el primer nivel de la calidad", aseguraba.
Este evento, articulado en colaboración con la Asociación de Adegueiros e Viticultores da Ribeira Sacra Ourensá, continuará hoy desde el mediodía y se encargarán de su clausura, el bodeguero José Mouriño y el humorista Isi. De Mouriño la alcaldesa de Castro Caldelas aseguró que "él fue la persona que se encargó de hilvanar las relaciones entre la administración y los bodegueros para que la Denominación de Origen estuviese en poco tiempo al público y funcionando".
