Uno de los proyectos más ambiciosos que ha asumido el grupo de gobierno de Ourense es el aprovechamiento del potencial termal de la capital mucho más allá del uso turístico. La idea está ya sobre el papel y consiste en explotar el agua que brota de los numerosos manantiales que se extienden por todo el territorio municipal para convertirlas en fuente de energía renovable. El proyecto, denominado GEOAtlantic, opta a la primera convocatoria del programa Interreg Espacio Atlántico 2014-2020, y pretende explorar las posibilidades de la geotermia ourensana como fuente energética para calefacción, electricidad e incluso aire acondicionado. Es uno de los proyectos que intentará sacar adelante el gobierno local pero podría haber más si el Concello consigue fuentes de financiación.
El alcalde, Jesús Vázquez, se reunió ayer con varios técnicos municipales y los ediles José Araújo y Jorge Pumar, para avanzar en el terreno de la eficiencia energética como uno de los ejes de la gestión municipal. La búsqueda de financiación para impulsar el uso de la riqueza termal como energía limpia está encaminada y depende ahora de la decisión de la Unión Europea. No obstante, el gobierno local quiere definir nuevos proyectos estratégicos en este terreno y para ello ve necesario establecer un protocolo de actuación en el que definir las acciones y, sobre todo, establecer los mecanismos para buscar financiación para los proyectos. En la reunión mantenida ayer quedó claro que son actuaciones de largo recorrido que pueden generar ahorros importantes.
La búsqueda de cooperación de organismos públicos y entidades privadas para financiar y desarrollar propuestas de eficiencia energética es una de las necesidades que ayer quedaron plasmadas en la reunión. En este sentido, el alcalde informó que el Concello de Ourense ya ha establecido contactos con los responsables del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, IDAE, perteneciente al Ministerio de Industria, para que sea este organismo el que tutele dicho protocolo. El objetivo no es otro que potenciar los recursos propios, e impulsar proyectos estratégicos y demostrativos que abran las puertas a posibles vías de financiación.
En el caso del proyecto GEOAtlantic, el Concello de Ourense opta a una ayuda que requiere cooperación internacional. Como socios, cuenta con instituciones de España, Portugal, Reino Unido, Francia e Irlanda. En caso de resultar aprobado, el proyecto contaría con un presupuesto total de 2,85 millones de euros para todos los socios, de los que el 75% estaría subvencionado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional de la Unión Europea. La primera decisión sobre esta iniciativa se conocerá entre septiembre y octubre, según las previsiones municipales.
