Dos décadas y 1.200 pisos rehabilitados al amparo del Plan Especial de Reforma Interior del casco histórico de As Burgas. La recuperación de la zona monumental, impulsada económicamente por el plan Urban, ha sido lenta pero constante desde que se aprobó el PERI en 1996. Veinte años y una fuerte crisis económica después, la rehabilitación experimenta un nuevo impulso gracias al empuje de la inversión pública pero también privada.
La junta de gobierno local concedió ayer cuatro nuevas licencias de rehabilitación y actuación en viviendas del casco histórico que se suman a intervenciones promovidas por la por la Consellería de Infraestructuras y Vivienda en tres edificios y a la reconstrucción de un edificio en la rúa da Barreira por parte de la Secretaría Xeral de Turismo como albergue de peregrinos.
En total, ocho proyectos que, en palabras del alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, "son la prueba del nuevo impulso de la zona monumental". Afirma que "con las licencias que ya se concedieron, estas cuatro y las que están por venir, además de las obras del albergue y las viviendas protegidas que promueve la Xunta, podemos presuponer entre todos que nuestro casco antiguo cobra más vida; la zona se está dinamizando y convirtiendo en el centro real de toda la ciudad Ourense".
Las licencias concedidas dan luz verde a la rehabilitación de un edificio en la calle Hernán Cortes, número 4-6, esquina con calle Bailén. Asimismo, recibe también autorización el proyecto básico y de ejecución de rehabilitación del inmueble número 8 de la rúa da Lúa. El número 15 de la calle Cabeza de Manzaneda podrá instalar un ascensor en el edificio para facilitar la accesibilidad de los vecinos y, por último, recibe licencia también el proyecto de reforma para el número 10 de la calle San Miguel. En este caso se trata de obras de reforma en el portal y en la cubierta, y la instalación de un ascensor.
Estas actuaciones se suman a las actuaciones recogidas en un convenio de colaboración con la Consellería de Infraestructuras y Vivienda por el que también recibieron licencia de obra el pasado mes de junio otros tres proyectos en el casco histórico promovidos por el Instituto Galego da Vivenda e do Solo, IGVS. Se trata de la reconstrucción de un edificio en el número 14 de la calle Cervantes, que será cedido por el Concello de Ourense. La redacción del proyecto y dirección de obra se licitará este año y se calcula una inversión de 446.695 euros. Lo mismo se prevé para el edificio de la calle Villar 3-5, en la que se habilitarán dos viviendas de protección social, por un importe de 407.936 euros. El paquete de proyectos que promueve el IGVS en el casco histórico incluye también la rehabilitación integral de un edificio para dos viviendas en la calle Villar, número 1. La inversión en este caso asciende a 385.000 euros. En total, 1.240.000 euros.
Esta misma semana comenzaron también las obras en la rúa da Barreira, número 12, donde se ubicará el futuro albergue de peregrinos. Este proyecto cuenta con un presupuesto de ejecución material de 486.532 euros y se prevé que la instalación esté operativa el año que viene.
Jesús Vázquez manifestó ayer que "resulta muy satisfactorio ver como la iniciativa privada interviene en esta zona, con obras de mejora y rehabilitación para dar calidad de de vida y contribuir a la puesta en valor de la zona monumental de la ciudad". Pero además, recalcó, "también las administraciones públicas hacemos un esfuerzo y apostamos con fuerza; entre todos podemos recuperar definitivamente el casco antiguo de la ciudad", señaló.
Museo en San Francisco
En total, la junta de gobierno aprobó ayer 18 expedientes que, según avanzó el alcalde en su comparecencia posterior a la reunión, dan luz verde a "proyectos verdaderamente importantes para la ciudad". Además de las licencias urbanísticas, entre las que se encuentra la autorización definitiva para la construcción de la futura sede del Campus da Auga, el equipo de gobierno aprobó el convenio de colaboración con la Consellería de Cultura para la rehabilitación por 1,6 millones de euros del espacio ocupado por la antigua iglesia de San Francisco y su conversión en museo. Un proyecto "ilusionante", en palabras del alcalde, ya que supone dotar a Ourense "del primer museo dependiente de la ciudad". El espacio de intervención es el que se encuentra en la entrada provisional al claustro gótico. Este museo completará el "pulmón cultural" de la ciudad como parte de un complejo formado por el Auditorio, la Escola de Teatro e Artes Escénicas y el Claustro de San Francisco, además de la Biblioteca Pública y el Arquivo Histórico Provincial, cuyas obras están a punto de finalizar.
