Se siente "muy honrada", después de que el presidente de la Xunta en funciones y candidato del PP le pidiera que encabezara la lista de las autonómicas por la provincia de Ourense, "porque en esta ciudad hay mucha gente que la avala su trabajo y su valía como persona y como políticos".
-¿Le avanzó algo el domingo el presidente en la Festa do Pulpo de O Carballiño?
-No, nada, me lo dijo ayer por la noche.
-¿Cuáles fueron sus palabras?
-Me dijo que contaba conmigo, para que fuera cabeza de lista por Ourense. Yo me limité a agradecérselo y le dije que espero estar a la altura de la confianza que ha depositado en mi persona.
-¿A qué hora la llamó?
-A última hora de la noche, después de las diez. Estaba con la cena y ya no pude seguir cenando.
-¿Ha tenido unos segundos de duda?, porque usted se encuentra en un puesto cómodo, como delegada territorial de la Xunta en la provincia.
-No hubo ni un instante de duda, porque si alguien que me merece tanto respeto y al que admiro como político, que es nuestro presidente, Alberto Núñez Feijóo, te llama para depositar en ti la confianza para que encabeces la lista, no se puede dudar.
-El reto es muy complicado, porque para que el PP pueda gobernar, tiene que ganar con mayoría absoluta.
-Por supuesto, nada está hecho. Tenemos que trabajar, en la línea que lo estamos haciendo. En Ourense lo demostramos campaña tras campaña. Yo espero que la gente sepa ver que se han pasado momentos complicados, pero en Galicia se realizó una buena gestión, priorizando las cuestiones más importantes, por las dificultades con las que nos hemos encontrado. Ahora estamos empezando a salir adelante. Tenemos que luchar por el reto de seguir gobernando para los ourensanos y para los gallegos, evidentemente.
-Dicen que usted es de la cuerda política de Manuel Baltar. ¿Eso puede ser un problema para que se entienda bien con Feijóo?
-Para nada. Eso se ha demostrado en todos los cargos que he desempeñado hasta ahora. Yo no soy ni de Baltar ni de Feijóo; yo soy del PP, y el PP somos todos. Esa es una página del pasado.
-¿Cómo ve usted al presidente provincial y al presidente gallego?
-Esa es una pregunta complicada. Para mi Manuel es amigo y es confianza en mí. Con el presidente, Alberto Núñez Feijóo, no tengo la confianza que puedo tener con Manuel, pero para mí es un ejemplo a seguir.
-¿El PP va a revalidar la mayoría absoluta?
-Yo pienso que sí. Tenemos que trabajar mucho. Estamos ahí rozando?
-¿Sería negativo que todo se quedara en tablas, como pasa en la política española?
-Por supuesto, eso nos perjudicaría a todos. El electorado debe pensar que nosotros tenemos un trabajo y una gestión realizada, frente a las liortas de los demás partidos que se presentan como alternativa.
-Usted lleva diez meses al frente de la Delegación Territorial de la Xunta. Tomó posesión el día 13 de octubre de 2015. Anteriormente estuvo seis meses como número dos, tras Rogelio Martínez, en el puesto de secretaria territorial. ¿Qué aportación supuso eso para su bagaje político?
-Eso me ha permitido conocer a mucha gente y me ha enriquecido como persona y profesionalmente. Antes había desempeñado varios cargos, siempre encasillada en temas concretos, como Educación y Justicia. Al llegar a la delegación, pude entrar en contacto con ámbitos como el medio rural, temas de sanidad, medio ambiente e infraestructuras, que desconocía. Como no podía ser de otra forma, la puerta de esta delegación ha estado abierta a todos los alcaldes y representantes de asociaciones, porque nuestro trabajo es escuchar a la gente, estar cerca de ellos, y en la medida de lo posible llegar a donde se pueda, pero siempre haciendo el esfuerzo de llegar un poquito a todos.
