El concejal de Medio Ambiente, Pepe Araújo, defiende la urgente intervención en este espacio ya que existe un "riesgo" que debe ser atajado cuanto antes. Recuerda que el terreno, desde su clausura en 2001, ha vivido diferentes vicisitudes, siendo los incendios los que más daño han causado a la instalación.

"El pleno aprobó por unanimidad la modificación de crédito por lo que disponemos de la partida para llevar el proyecto a cabo", indica el edil. "Serán los técnicos los que marquen los pasos a seguir pero confío en que a finales de este año o principios del siguiente podría estar en funcionamiento".

El gobierno local no valora todavía los usos futuros para esta parcela de 85.000 metros cuadrados una vez el suelo esté estabilizado. Lo urgente, apunta, es "ordenar la instalación, reparar la canalización de los gases y garantizar que las aguas se depuran correctamente antes de ir al saneamiento público".