Sin mayoría, el gobierno de Ourense depende de los síes de la oposición para cumplir con su parte en una infraestructura básica. Finalizadas las obras del centro de salud de O Couto su apertura se demorará a 2017, un año después de los previsto inicialmente, porque falta la urbanización del entorno, un paso imprescindible para la puesta en marcha de una dotación que prestará servicio a 12.000 personas del barrio de O Couto -uno de los más populosos de la ciudad-, así como de los núcleos periféricos de Reza, Vistahermosa y Rabo de Galo. Preparar los accesos compete al Concello. El pleno debate este viernes una modificación de crédito por importe de 735.000 euros que sufragaría la urbanización. Si la oposición da luz verde -el PP necesita los votos a favor de Democracia Ourensana o el PSdeG-, el proceso de licitación se acelerará, según el alcalde.

Tras atribuir culpa al anterior gobierno local del retraso en la tramitación de la infraestructura, Jesús Vázquez subrayó ayer que "con el visto bueno del pleno a la modificación, se dará carácter inmediato a la licitación de las obras de urbanización". Los técnicos ultiman un pliego que valorará la propuesta económica pero también tendrá en cuenta, en el apartado de mejoras, a las empresas que acorten el plazo inicialmente previsto de ejecución, unos 5 o 6 meses.

Licencia sin la ejecución total

Finalizar la adecuación del perímetro antes de que finalice el año parece complicado. No obstante, el regidor de Ourense recordó que una vez que los accesos estén allanados "es posible dar licencia de ocupación con un porcentaje de las obras terminadas, sin necesidad de que la urbanización esté completa".

En las últimas semanas y sin fecha aún confirmada de apertura -el Concello barajó abril de 2017-, el Sergas convocó a asociaciones profesionales y sociales, y a los propios vecinos, para mostrar las instalaciones, totalmente rematadas y con las consultas equipadas.

El que será el sexto centro de salud de Ourense contará con siete consultas de medicina general, otras tantas de enfermería, una de matronas, otra de farmacia, una de fisioterapia y gimnasio, una consulta de pediatría y otra de enfermería pediátrica, así como una de atención de urgencias y otra para consulta del programa de la mujer. Los usuarios tendrán a su servicio a un trabajador social, odontología, un higienista dental, una sala de educación maternal y una sala de técnicas (cirugía menor).