La Guardia Civil sostiene que J.S.A, de 50 años de edad y vecino de Verín, era el receptor de los 12.800 calzoncillos y calcetines presuntamente falsificados, una mercancía valorada en 300.000 euros y que la Guardia Civil de Tráfico halló en una furgoneta, el pasado 21 de julio, arrestando aquel día a dos hombres de nacionalidad lusa, J.A.F., de 26 años, y G.M.A., de 37. Tanto los transportistas, que no pudieron acreditar permiso de fabricación, venta o distribución, como al presunto receptor de la ropa falsa se les imputa un delito contra la propiedad industrial