El fuego, alentado por las altas temperaturas registradas ayer en la provincia de Ourense, volvió a asolar zonas de bosque y raso de poblaciones ya afectadas por el fuego este verano, y especialmente en los últimos días con incendios forestales en Verín y Oímbra.
Concretamente a las seis de la tarde de ayer se declaró un incendio en la localidad de Rabal, en el Concello de Oímbra, que se propagó con rapidez y, dada la cercanía de las llamas a la carretera Nacional 535 así como de la nube de humo que generó el incendio a causa también de la sequedad del suelo, de matorral y bosque en la que se produjo, obligó a la Guardia Civil de Tráfico a cerrar al tráfico rodado esa vía durante más de una hora.
El corte de Tráfico se produjo entre los kilómetros 10,5 y 11,5 de la mencionada carretera Nacional 535, donde, como puede verse en la fotografía anexa, las llamas y el humo restaron visibilidad, obligando a suspender la circulación hasta las 19.45 horas, momento en el que una vez estabilizado el fuego volvió a reabrirse al tráfico con normalidad.
Medios de extinción
En la extinción de este incendio forestal colaboraron dos patrullas de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil, así como cuatro helicópteros, dos brigadas de refuerzo de incendios forestales (Brifs), así como tres camiones de bomberos.
Según las estimaciones iniciales, el fuego afectó a unas siete hectáreas de monte raso pertenecientes a fincas privadas y estaba totalmente estabilizado al atardecer.
Por su parte, la Consellería de Medio Rural dio por controlado en la noche del domingo el incendio que desde el pasado viernes afectó a la localidad ourensana de Monterrei y había calcinado ya 145 hectáreas, según las estimaciones del departamento autonómico a última hora del domingo.
Según ha informado la Xunta, el incendio ha quedado controlado en torno a las 22.00 horas, cuando la superficie afectada ascendía a 145 hectáreas, de las que 12 eran de terreno arbolado.
En las tareas de extinción del incendio han participado, desde que se iniciara en la tarde del viernes, un técnico, veinte agentes forestales, 36 brigadistas, dieciocho motobombas, siete palas, ocho helicópteros y seis aviones.
Altas temperaturas
Las altas temperaturas que está registrando estos días la provincia, con máximas que superaron los 38 grados, la alta sequedad del aire y mínimas que no bajaron de los 16 grados durante la noche, hacen que la provincia siga en situación de riesgo en cuanto a incendios forestales.
Las previsiones para hoy, martes, se mantienen en Ourense con las temperaturas más altas de Galicia, por encima de los 37 grados y mínimas que no bajarán de los 17 grados, es decir hasta cinco grados por encima de temperatura de la media gallega.
El riesgo continúa en lo que se refiere a incendios forestales, pues se prevén para la jornada de hoy cielos poco nublados o despejados, así como para los próximos días, con temperaturas que no bajarán hasta el fin de semana de los 35 o 33 grados de máxima, temperaturas consideradas por expertos de Meteogalicia como "altas" para las habituales en este periodo. En cuanto a la calidad de aire se espera que mejore y en general se mantiene en buenos parámetros en la provincia.
