La Fiscalía de Ourense solicitaba una condena de 3 años y medio de prisión, pero el castigo finalmente se ve rebajado a 2 años, y sin efectos en la práctica, después de un acuerdo de conformidad alcanzado entre el acusado y el ministerio público. Daniel T. F. , de 32 años, suscribió el pacto ayer, sin que fuera necesaria la celebración de la vista oral prevista en el juzgado de lo Penal. Rubricando la conformidad, el hombre reconoce que lesionó a su prima en la cabeza, utilizando el palo de un hacha.

La agresión tuvo lugar sobre las 18 horas de la tarde del 14 de junio de 2015. Sin que conste un motivo del ataque, el acusado se dirigió a su prima, que se encontraba en el exterior de su domicilio, ubicado en Pazos (Verín), y le golpeó en la cabeza con el palo de un hacha, provocando que la mujer cayera al suelo.

Como consecuencia del impacto, la víctima sufrió un traumatismo cráneo encefálico leve, una herida inciso contusa en la zona occipital de la cabeza, así como policontusiones. La mujer necesitó dos asistencias facultativas, además de tratamiento médico quirúrgico consistente en la aplicación de grapas. Las heridas tardaron en curar un mes, 20 días de carácter impeditivo para sus ocupaciones.

Tras los hechos, el juzgado de Instrucción Número 1 de Verín dictó una orden cautelar de alejamiento, con fecha 16 de junio de 2015. El auto prohibió al imputado acercarse a su prima, a su domicilio, a su lugar de trabajo o a cualquier otro lugar en el que se encontrara. Con la condena de conformidad, la orden de alejamiento se extiende a un radio mínimo de 200 metros por un periodo de 5 años.

El acusado está obligado a satisfacer la responsabilidad civil, que fue cifrada en 1.300 euros. El ministerio público no se opondrá a que la condena de 2 años quede suspendida (el hombre no podrá reincidir), una vez esté saldada la indemnización, o bien se acredite que el agresor es insolvente. Carecía de antecedentes penales.

El acuerdo de conformidad suscrito ayer tras una negociación previa entre la defensa y la Fiscalía implica un cambio de versión del encausado. Tanto en su declaración ante la Guardia Civil como en su interrogatorio en calidad de investigado en el juzgado, había negado los hechos. En la comparecencia de instrucción aseguró, incluso, que el origen de las lesiones sufridas por su prima era que se las había causado ella misma. Cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, la mujer, con una toalla en la cabeza para paliar la hemorragia, identificó a su primo como el culpable.