Llevaban cerca de un año en su búsqueda, pero finalmente fue detenido cerca de la estación de autobuses, es decir cuando se disponía posiblemente a continuar su huida. La Policía Nacional procedió a detener anteayer en las inmediaciones de la estación de buses de O Pino a un varón que se encontraba ya condenado en numerosos procedimientos penales y sobre el que los juzgados de lo Penal de Ourense habían decretado un total de trece requisitorias, todas ellas vigor, cuatro de ingreso en prisión.

Al detenido, de 46 años de edad, le constan numerosos antecedentes policiales, que suman un total de 26 detenciones, en gran número practicadas por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía.

El ahora detenido, de etnia gitana, que se encontraba indocumentado, aportó en un primer momento datos de filiación falsos, intentando así en un primer momento evitar su arresto.

Su actitud esquiva y la incongruencia de sus explicaciones a los agentes de la Unidad de Prevención y Reacción determinaron que fuese necesario su traslado a la comisaría para su identificación, en virtud de lo dispuesto en la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana.

Una vez acreditada su identidad, se procedió a la comprobación de todas las órdenes de búsqueda judiciales que figuraban en vigor contra su persona y respecto de las que se pudo constatar que se había ido sustrayendo de la justicia desde hacía más de un año.

Buscado por robos

De los distintos tipos de requisitorias judiciales existentes pesaban sobre dicha persona cuatro órdenes de detención e ingreso en prisión, tres de detención y personación y varias de averiguación de domicilio y paradero, todas ellas en relación con procedimientos penales por delitos contra la propiedad, en los cuales ya había recaído sentencia condenatoria y, en su mayoría, por delitos de robo con fuerza y hurtos. Por todo ello, fue ingresado en el Centro Penitenciario de Pereiro de Aguiar.

Según explicaba ayer comisaría, " si bien todos los ciudadanos tienen la obligación de colaborar con la Administración de Justicia, para los agentes de la Policía Nacional, así como para los de las demás Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, constituye un deber el proceder a la detención, en particular, de aquellas personas procesadas o condenadas que se encuentren en situación de rebeldía".