Después de casi un año sin saber de los perros asilvestrados, el municipio de Cenlle ha vuelto a ser objeto de los ataques de estos animales desde hace un mes aproximadamente. De momento, solo han hecho daño a perros domésticos pero existe el temor a que también pueda atacar a las personas. Su alcalde, Gabriel Alén, dice que está retomando el contacto con la Diputación, Medio Ambiente y Seprona para que tomen medidas.
El Concello de Cenlle firmó en 2013 un convenio de colaboración con la Diputación para la recogida de estos animales, y en los últimos tres años, en diferentes etapas, señala el regidor que la manada se redujo considerablemente, ya que se capturaron algo más de 40, pero se debieron reproducir. Tras un largo periodo de ausencia, ahora se vieron 3 o 4 en las localidades de Lentille y Esposende, donde dice los propios vecinos observaron cómo atacaban a sus mascotas.
Desde hacía tiempo solo se veían por el municipio perros extraviados, incluso con chip que su dueño reclamaban, pero ahora han vuelto los asilvestrados que "si son un problema", por lo que se retomo contacto con Diputación, Medio Ambiente y Seprona, ya que éstos que aparecieron se pueden incluso reproducir y aumentar su número.
Cabe recordar que en los últimos años estos animales asilvestrados se vienen visualizando por los vecinos no solo de Cenlle sino también de Ribadavia, y se mueven por los montes de Esposende, Pazos, Lentille, Santo André, Groba y As Chabolas.
En la comarca de O Ribeiro también es un problema el lobo, cuya presencia en tierras del Monte do Faro a causado alarma a los ganaderos que ven como ataca a sus rebaños. Los últimos ataques se registraron hace poco menos de dos meses y esperan que no vuelva a aparecer.
