Un hombre de 54 años se sentó en el banquillo ayer, acusado de presuntos delitos de amenazas a su exmujer, y daños en la vivienda que le había sido adjudicada a ella después del proceso de divorcio. La Fiscalía solicita una pena de 9 meses de prisión por el primer delito, así como una orden de alejamiento y comunicación con respecto a la víctima por un periodo de 2 años.
En febrero de 2013, el juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Verín atribuyó a la mujer una vivienda en A Gudiña, cuyo uso correspondió desde 2009 y hasta ese momento al imputado. Presuntamente, cuando la mujer pidió telefónicamente al hombre que pusiera la vivienda a disposición, el 3 de abril de 2013, este le habría dicho que le iba a pegar dos tiros, según el relato de hechos que hace suyo el fiscal.
Finalmente, la mujer pudo acceder al domicilio el 4 de abril de 2013. Se la encontró con numerosos daños. La acusación sostiene que el acusado causó los desperfectos intencionadamente.
Así habría sido el autor de varias pintadas en las paredes con expresiones como "zorra, te di muchos consejos y nunca hiciste caso"; "que Dios me perdone pero las hijas de puta existen", u otros descalificativos como "ladrona" o "mentirosa". Asimismo, el encausado provocó presuntamente desperfectos en el mobiliario de la vivienda, como cajones y armarios. El importe de los desperfectos ascendió a cerca de 2.500 euros.
La mujer acudió a presentar denuncia ante la Guardia Civil tras ver el estado del domicilio. Relató a los agentes que su relación de pareja había sido degradante, pero nunca llegó a denunciarlo, optando por el divorcio como mejor opción. Los agentes documentaron las pintadas. Al legar al piso se encontraron con gran cantidad de pintura esparcida por el suelo de todas las estancias.
En caso de condena, el varón tendrá que indemnizar a su exmujer con esa cantidad, más los intereses legales. Además, el ministerio público pide que se le imponga una multa por un importe total de 6.480 euros.
