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El radar de tramo de la N-525 en Ourense suma 800 multas por excesos en 2 meses

El trecho de 3,76 kilómetros está limitado a 70 km/h en sentido Santiago -De media, cada 90 minutos hay una denuncia - Desde su puesta en marcha, ningún siniestro con heridos

Tráfico estudia adelantar el punto de control final del radar de tramo, para evitar que los conductores lo eludan abandonando la N-525 por una salida inmediatamente anterior. // Jesús Regal

Desde el 17 de marzo, un radar de tramo vigila los excesos de velocidad en un tramo de 3,76 kilómetros en el acceso y salida de Ourense ciudad por la N-525. Unos 800 conductores fueron detectados por el sistema de la Dirección General de Tráfico, uno de los primeros en ser implantados en España en carreteras convencionales.

El ritmo de denuncias generadas por este radar es, de media, de una cada 90 minutos, en un trazado con una intensidad de tráfico de 7.500 vehículos al día, y en el que, desde el año 2010, se registraron 121 accidentes con un balance de 7 personas fallecidas, 12 heridas graves y 26 con lesiones leves, según los datos facilitados por la DGT cuando el control de velocidad del tramo se puso en funcionamiento. Según la administración, la causa más habitual de los siniestros fue el exceso de velocidad en los vehículos que circulaban en dirección a Santiago, por lo que el sistema en funcionamiento desde ayer busca reducir la siniestralidad grave. Precisamente, desde la Jefatura Provincial se destacaba ayer que la implantación ha servido para que la seguridad vial del tramo mejorara. Desde el 17 de marzo no ha sucedido ningún siniestro con heridos en la conflictiva N-525.

La circulación empieza a medirse al atravesar el arco situado en O Viso, antes de la salida a una gasolinera, y finaliza poco antes de Gustei (Coles) y de la incorporación a la OU-150, que lleva a A Peroxa. Son 3,76 kilómetros limitados a 70 por hora de máxima y de media. El exceso se detecta a partir de 78. La Dirección General de Tráfico está estudiando acortar el trazado bajo vigilancia. Justo antes del punto final de control -dotado como el primer arco de una cámara que fotografía el coche infractor-, hay una salida que propicia que algunos automóviles puedan abandonar la nacional N-525 sin verse afectados por la detección del radar de tramo.

En estos dos meses de vigilancia, la mayoría de los excesos se saldaron con multa sin retirada de puntos. Aunque hubo casos flagrantes. El que más, un infractor que atravesó la zona de 70 a una media de 128.

Por el momento, el trecho vigilado por la DGT dispone de una longitud de 3,760 metros y se ubica entre los puntos kilométricos 242,2 y 246,0 sentido Santiago. El que fue segundo radar de tramo instalado en España en una vía convencional, se apoya con un radar fijo en el kilómetro 244,850, en el sentido ciudad de Ourense.

Esos dos dispositivos, activos desde el 17 de marzo en la N-525, elevaron a 12 el total de radares fijos existentes en la provincia, 7 de ellos en la autovía Rías Baixas, la A-52.

3.170 "cazados" en la provincia

Según los datos relativos al año 2015 de la Jefatura Provincial de la DGT, en toda la red de carreteras de la provincia de Ourense, 3.170 conductores que tuvieron que pagar multa por sobrepasar los límites de velocidad establecidos, lo que supone una media de más de 8 "cazados" al día. La mayoría (2.796) perdió 2 puntos; 298 perdieron 4, mientras que a 89 pisar el acelerador de manera ostensible les acarreó la retirada de 6 puntos. Por cuestión de excesos de velocidad, la DGT comunicó el año pasado la detracción de un total de 7.408.

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