José Antonio Vázquez Taín: "La corrupción no es un gen que tienen otros, cualquiera puede llegar a desarrollarla"

Pese las apariencias, no es ningún suceso de la historia local, sino que es el argumento de "El mar sin fondo",de editorial Espasa, el cuarto libro de José Antonio Vázquez Taín (A Merca, Ourense, 1968). Una novela plagada de personajes corales en la que su autor, uno de los jueces más populares de España, azote del narcotráfico e instructor de casos como el de Asunta Basterra o el robo del Códice Calixtino, pone el dedo en la llaga de la corrupción y da voz a los que sufren.

--Miedo me da señor Taín. No deja usted títere con cabeza en su crítica a la corrupción: políticos, sindicalistas, periodistas, notarios.

-Es lo que tenemos, salimos de un país que hace dos generaciones vestía de alpargata, nuestros padres nos dieron todo para crear en la transición una nueva sociedad desde cero, y lo que tenemos es una crisis estructural; nos olvidamos de dónde venimos, quiénes somos y de que solo el trabajo y el esfuerzo valen para algo.

-¿Un mar de fondo es una novela o pura telerrealidad?

-Es una radiografía social. En mis anteriores novelas traté de elogiar a profesionales que se juegan a vida a diario. Ahora he sido más realista. No hay un colectivo en el que no haya calado esa ambición desmesurada.

-El libro habla de un expresidente que ofreció trabajo a cambio de sexo. ¿También es un argumento novelesco?

- Cronológicamente "El mar sin fondo" lo escribo entre marzo y junio de 2015, mucho antes del hecho que usted insinúa y le aseguro que pensé ya entonces que se podrían relacionar con los hechos que cuento a muchos expresidentes. Sexo y poder van unidos. Pero dejé de preocuparme por el tema, para escribir en libertad

-Cuatro libros en apenas cuatro años . ¿Se cansó de escuchar interrogatorios y ha tenido la necesidad de contar usted lo que sabe?

-En los interrogatorios todo el mundo miente lo que puede, para tratar de convencerte de una realidad que muchas veces solo existe en su cabeza . Pero el libro pretende reflejar una cruda realidad. Es una forma de decir, mire esto es lo que hay, podemos seguir así o bien pensar que al final las cosas sencillas pueden generar una vida mas intensa que la de los que solo se dedican a buscar dinero y sexo

-Teresa, una de las coprotagonistas de su libro ¿Es el ejemplo de estadistas que empezaron defendiendo la lucha por las libertades y acabaron en las listas de la corrupción?

-Refleja el arrepentimiento de una persona con conciencia y muestra que el crimen y la corrupción no son algo ajeno a todos nosotros, sino que las circunstancias y las oportunidades que dan la vida son las que te marcan.

-Vamos que es más fácil ser honrado si no se tiene acceso a la caja de caudales

-El mal o la corrupción no es un gen que tienen otros, todos podemos desarrollarlo. Es más fácil ser honrado cuando no tienes acceso a la llave de la caja de caudales

- Sin embargo la protagonista de su novela, se arrepiente, pero los políticos son capaces de defender su mentira hasta el final y sin dejar de mirar fijamente a cámara

-En ningún país civilizado nadie puede mantener durante años su inocencia como en este, sin que un tribunal le diga, "miente". Aquí tenemos casos de corrupción económica, política o sindical, sin un pronunciamiento durante años. Eso hace que mentir hasta el final sea rentable para ellos mientras siguen en activo.

-La lentitud de la justicia es una de las críticas que hace la abogada Beatriz Seijo, una de las protagonistas de la novela que es además su mujer en la vida real. Vaya homenaje ¿no?

-Sí, representa en la novela la parte buena de la justicia, la de los profesionales que siguen creyendo en ella aunque sea lenta Es como el hijo, del que asumimos cualquier defecto.

-Ya pero, permítame mi pequeña "revancha" ¿y quién juzga a los jueces?

-Somos un colectivo muy pequeño, poco más 8.000 para un número ingente de expedientes en toda España. Pero es bueno que nos critiquen, no somos sagrados, ni perfectos ni infalibles.

-¿Teme que algunos colectivos no asuman la críticas directa que les hace en su libro?

-Aún haciendo lo que tú crees que es útil para la sociedad, y me remonto incluso a mi época de juez en Vilagarcía de Arousa [la actuación de Taín desbarató el mayor alijo de cocaína de la historia de Galicia] nunca vas a contentar a todos. En el momento en el que dejas de pensar en los demás como condicionantes de tu propio pensamiento, es cuando eres libre.

-¿Qué le diría a los que le acusan de utilizar su cargo de juez para hacer novelas?

-En ocasiones me han dicho "solo por ser juez, deberías estar callado" . Mi discreción es total con aquellos asuntos que investigo, no tiene porque serlo con aquello que tiene relación con cómo es la sociedad española. Además he tenido una vida profesional muy intensa y creo que tiene uno una obligación de advertir de que hay personas que pasan hambre, que sufren violencia de género. Muchos de los personajes del libro representan estas y otras problemáticas.

-Me han llamado la atención sus referencias al mundo de la mujer, incluso en aspectos muy íntimos de su sexualidad. ¿Tanto ha investigado al respecto?

-Para ser útil a la sociedad hay que escucharlos, pero luego he tenido el privilegio de tener una mujer muy transparente y humana que me enseñó mucho del alma femenina. Pero no busco ser friki ni ir de original; solo ser auténtico.

- ¿La literatura va a eclipsar al juez?

-Mi profesión es una forma de devolver a la sociedad aquello que recibí de ella. La literatura sin embargo, es como un plus, una forma de desarrollar una inquietud, pero que no me llenaría tanto porque mi auténtica vocación es mediar en los conflictos para tratar de conseguir soluciones.

-El libro está lleno de referencia a calles y restaurantes de Ourense, algunos ya desaparecidos ¿habrá una presentación aquí?

- "El mar sin fondo" es también un homenaje a Ourense así que estamos preparando una presentación muy especial en esta ciudad de un libro cuya trama se desarrolla casi íntegramente aquí.