Un hombre de 43 años aceptó ayer su responsabilidad en un grave incendio forestal que afectó a 83 hectáreas de superficie en la localidad de Faramontaos, en San Cristovo de Cea, el 16 de agosto de 2011 que generó gastos de extinción y daños superiores a 300.000 euros que deberá abonar en concepto de indemnización. Sin tener en cuenta "las más elementales normas de cuidado", señala la fiscal en su escrito aceptado ayer por el acusado a través de una sentencia de conformidad, realizó trabajos de soldadura y montaje de ruedas de una puerta metálica en un muro.

En aquel momento el termómetro registraba 34,85 grados y además había fuertes rachas de viento que provocaron que una de las chispas de la soldadora fuese a caer sobre la vegetación seca. No hizo falta nada más para que se propagase el incendio con desastrosas consecuencias.

Ardieron 83,02 hectáreas, de las cuales 73,25 son arboladas y 8,77 de superficie agrícola. Requirió la intervención de los servicios de extinción de la Xunta cuyo trabajo generó unos gastos de 166.760 euros. Además, el fuego provocó daños por 176.293 euros. Ambas cantidades se han incorporado a la sentencia en concepto de responsabilidad civil que deberá asumir el acusado. También se registraron daños en varias fincas de particulares que renunciaron al ejercicio de las acciones civiles y penales, salvo uno de ellos que sí reclamó daños.

La fiscal pedía inicialmente para este acusado una pena de 9 meses de prisión que fue reducida por conformidad a 6 meses de prisión y finalmente sustituida por seis meses de trabajos en beneficio de la comunidad, manteniendo la responsabilidad civil.