El trabajo de Manuel Pardo, se basa en conceptos que no estaban en vigor en los años 60 cuando se puso en marcha ese transporte del agua de As Burgas hasta el pabellón de Os Remedios para: el uso de de fuentes de energías naturales, baratas y sobre todo medioambientalmente renovables.

"El precio de los combatibles o de la factura eléctrica no era seguramente tan importante entonces como lo ha sido con el paso de los años; ahora es necesario hacer proyectos que miren hacia esas energías naturales y lo curioso es que se exigen en muchos proyectos de vivienda particular, y luego no siempre se aplican en los edificios de uso público indica Manuel Pardo.

En caso del agua termal de As Burgas "no tenemos una caldera convencional, pero en términos de ahorro energético , el manantial de As Burgas puede considerase como una gasolinera y su agua como gasolina", explica en cuanto al potencial de recursos termales que se están desaprovechando.

"Esa agua termal es la que calienta luego el agua que se utiliza en las duchas del pabellón, la de las piscinas, la calefacción; tal vez no llegue para el suministro de todo el recinto, pero su aportación es muy importante" . La auditoría incluye otras obras en el pabellón de anclajes, soportes válvulas. En total poco más de 200.000 euros de inversión, lo que cuesta la factura de la luz del pabellón en dos años.