La implantación del carril bici en la ciudad lleva camino de ponerse en marcha en un plazo de tiempo "razonable". Esa es al menos la previsión que maneja el gobierno municipal , después de que la Mesa Municipal de la Movilidad le diera un impulso a la iniciativa.

Así, en la jornada de ayer se celebró en la Concejalía de Infraestructuras la primera reunión para abordar esta cuestión, en la que participaron representantes de colectivos que forman parte de la Mesa de Movilidad, con objetivo de ir estructurando un proyecto integral que culminará con la implantación efectiva y real del carril bici.

En este sentido, el responsable del área de Infraestructuras y a su vez portavoz del gobierno municipal, José Araújo, aseguró a FARO que "el compromiso es claro: hacer posible el carril bici", aunque explica que "esperamos contar con fondos europeos para que su implantación sea a corto plazo", de lo contrario se deberá hacer por fase.

En la primera reunión de trabajo participaron colectivos como Masa Crítica, técnicos de la Policía Local, que son los responsables de la elaborar los correspondientes informes para su implantación, así como la Concejalía de Infraestructuras, departamento municipal responsable de su puesta en marcha. También participó Javier Barreal, reconocido experto en la materia, que ha profundizado en el estudio de la futura implantación del carril bici en la ciudad.

Trabajo intenso

Lo que puso de manifiesto el concejal de Infraestructuras y Movilidad, José Araújo, al término de la reunión, es que "este gobierno municipal está trabajando intensamente para conseguir un proyecto de ciudad; un proyecto de conjunto que someteremos a los pertinentes informes técnicos para implantar el carril bici de manera gradual, como está sucediendo en todas las ciudades que disfrutan de una notoria calidad de vida y de una movilidad sostenible y eficiente".

Y destaca que su avance está en relación directa con el "trabajo de circunvalación que se hace", en alusión al tramo Norte, que entiende "es una realidad", una vez que se aprobó el proyecto que está directamente ligado con el bulevar termal, en la zona de entrada de la antigua carretera de Vigo y la autovía Rías Baixas, entre Quintela y la Chavasqueira.

Una actuación que para Araújo va más allá de una mejora sustancial en lo que se refiere al tráfico rodado en la ciudad, en referencia a que permite "humanizar" esa zona de la ribera del Miño, que es donde se concentra un importante potencial termal.

Otro de los aspectos relevantes para Araújo, y que forma parte de la hoja de ruta marcada, es que la actuación prevista contribuirá a "la pacificación del tráfico" en la ciudad. Y así, el uso de la bicicleta como un medio de transporte alternativo al vehículo es uno de los objetivos que forma parte del Plan de Movilidad municipal, que se aprobó en agosto de 2012 pero que está pendiente para su desarrollo efectivo. El motivo no es otro que la aprobación definitiva del nuevo Plan Xeral, de Ordenación Municipal (PXOM) que supone reordenar el tráfico y remodelar algunos de los principales viales y enlaces del casco urbano.