Los hermanos Carlos, Aquilino y Noel S. B., de entre 23 y 32 años de edad, asumen los cargos. Estaban citados ayer a juicio, por un delito de robo con fuerza, cometido el 3 de marzo de 2015 en el antiguo hospital psiquiátrico "Cabaleiro Goás", de Toén, que permanece cerrado desde hace más de 4 años. Los tres llegaron ayer a un acuerdo de conformidad, haciendo innecesaria la celebración de la vista. La Fiscalía solicitaba, inicialmente, una condena de 9 meses de prisión para cada uno de ellos. El pacto ha rebajado el castigo a 3 meses, sustituyéndose la pena de prisión por el mismo periodo de localización permanente. Además, los acusados indemnizarán al Sergas con más de 3.400 euros.
El antiguo psiquiátrico de Ourense cerró sus puertas en 2012, tras medio siglo de actividad. Desde entonces, sus instalaciones, accesibles a vándalos y delincuentes, han sido objeto de robos y daños. Medicinas y antiguos historiales se han acumulado en una estampa de sórdido abandono en los más de 400.000 metros cuadrados, actualmente sin uso.
La Guardia Civil los descubrió
El 3 de mayo de 2015, tal y como ha quedado probado, los tres hermanos acudieron al recinto sobre las 15,30 horas. Forzaron la puerta de acceso a la caseta del transformador, que suministraba electricidad a todo el antiguo complejo. Los jóvenes cortaron los cables con la intención de apoderarse de las partes metálicas del generador. No consiguieron su propósito, puesto que fueron sorprendidos por agentes de la Guardia Civil, cuando se encontraban en el exterior de la caseta, despedazando el transformador.
