La diputada Alexandra Fernández, de En Marea-Podemos, se opuso frontalmente al compromiso planteado por el PP de que el nuevo Congreso siga impulsando la construcción de la A-76 entre Ponferrada y Ourense, aunque finalmente salió adelante con el apoyo del PSOE, pese a tildar la iniciativa de "electoralista".

Alexandra Fernández se opuso a la construcción, argumentando "que no estaba justificada por intensidad de tráfico" y aseguró que "bastaría con mejorar la carretera N-120". El diputado del PP Celso Delgado calificó de "inaceptables" estas afirmaciones, debido a que la actual carretera nacional "está claramente superada por el tráfico actual y provoca molestias y retrasos en los desplazamientos".

En Marea-Podemos también afirmó que esta carretera provocaría "despoblación, desestructuración social y económica y no favorecería a las áreas intermedias", así como que no supondría ningún ahorro en tiempos de desplazamiento. Celso Delgado entiende que estos argumentos "también son falaces, puesto que lo que hará esta autovía será dar más accesibilidad a todas las poblaciones de las comarcas que atraviesa, favoreciendo el asentamiento poblacional y la actividad económica".

Paralización

Alexandra Fernández pidió expresamente "la paralización de todo lo adjudicado y en fase de licitación". Según Celso Delgado, "esta petición, afortunadamente solo secundada por ellos mismos, va en contra de los intereses generales de todos los ourensanos, lucenses y bercianos, que han expresado en multitud de ocasiones, por medio de sus alcaldes y representantes políticos, su apoyo decidido a esta autovía, al igual que lo han solicitado con reiteración empresarios, trabajadores, transportistas y un largo etc".

En la votación, la iniciativa obtuvo el respaldo de los 31 diputados del PP, PSOE y Ciudadanos, se abstuvieron ERC, DL, Compromís y PNV, y votaron en contra los 8 diputados de En Marea-Podemos.