El trágico accidente de ayer en Sandiás, con 1 fallecido, 1 herido grave y herido leve, rompe la tendencia positiva en materia de seguridad vial en Ourense. Desde el pasado mes de noviembre, la provincia no registraba ningún siniestro en carretera con fallecidos. Esta pasada Semana Santa, de hecho, fue el único territorio de Galicia donde no hubo que lamentar pérdidas de vidas en carretera. El joven portugués fallecido ayer representa la primera víctima mortal en lo que va de 2016 en la provincia. El año pasado se cerró con 9 fallecidos -7 en carretera y 2 en atropellos urbanos-, y con más de 70 heridos graves. El 2015 fue el mejor ejercicio de la serie histórica en materia de siniestralidad vial, con la mitad de víctimas que en 2014 y una sexta parte que en el año 2000.