M. C. C., el propietario de varios perros considerados peligrosos acató ayer una condena de 3 meses de prisión -sin efectos, al carecer de antecedentes- por las graves heridas que tres de sus animales causaron a su tía, en O Irixo. La víctima pasó 2 meses hospitalizada. El ataque tuvo lugar el 5 de marzo de 2014. El acusado paseaba por un camino con 4 perros Dogo argentino, una raza catalogada como potencialmente peligrosa. Iban sueltos y ninguno de ellos llevaba bozal.

Por la misma pista transitaba la víctima. Cuando se cruzaron, una de las perras se abalanzó sobre la mujer y, a continuación, lo hicieron otros dos canes, mordiéndola repetidamente en diversas zonas del cuerpo. El ataque se prolongó hasta que el dueño, sobrino de la víctima, consiguió separar a los animales.

Por "incumplir las más elementales normas de cuidado", al acusado se le considera autor de un delito de lesiones por imprudencia grave. Ya había sido denunciado por el Seprona, por tenencia de animales peligrosos sueltos, y por agresiones de sus perros a otros animales. Llegó a tener hasta 6 perros de la raza Dogo argentino pese a tener licencia municipal y obligatoria solo para uno.

33.000 de factura sanitaria

La mujer sufrió graves heridas en una pierna, un brazo, la cabeza o la ingle. Necesitó cirugía y 61 días de hospitalización, quedándole secuelas. Los gastos ocasionados al Sergas como consecuencia de la asistencia a la víctima fueron cifrados en casi 33.200 euros.

El acusado cuenta con una póliza de seguros que cubre eventuales daños causados por animales. Solidariamente con la compañía, el infractor tendrá que indemnizar a la víctima con 10.450 euros por los días de incapacidad, más 5.500 por secuelas. Asimismo, la condena lo obliga a abonar al Sergas la factura sanitaria causada.