El vicario general de la diócesis, José Joaquín Borrajo Iglesias, indicó que el desaparecido párroco de Vilanova, Adolfo Enríquez, "se había dado cuenta de que Dios está entre los hermanos, por eso les daba limosnas" a las personas necesitadas que iban a pedir a su casa. Esas palabras lograron sensibilizar a los feligreses que se encontraban en el templo, por lo que no dudaron en calificar la homilía como "extraordinaria; de un altísimo nivel". Otro de los momentos más emotivos, fue cuando los cuarenta sacerdotes que concelebraron la misa fueron en procesión hasta el sepulcro, con la demás gente que había en la iglesia, para rendirle una cerrada ovación a los restos mortales de Adolfo Enríquez, "por el bien que había realizado".
El sobrino del sacerdote brutalmente asesinado, José Manuel Enríquez, "pidió justicia; no venganza", después de darle las gracias a la gente por la solidaridad y el apoyo que le habían mostrado a la familia.
El actual párroco de Vilanova, Antonio Gómez Rojo, explica que la emotividad estuvo a flor de piel, algo que "viene a través de la fe, por saberlo presente". En ese sentido, destaca que esa emoción se debe a que "han matado a una persona de fe, a una persona entregada, a una persona que no buscó aparecer, sino que servía; a una persona que no buscó tener, sino que daba; a una persona que no buscó que lo inciensaran, sino que daba él incienso a los demás; a una persona que tenía la casa abierta para todos".
Cada vez más, los vecinos de Vilanova y de toda la comarca de Celanova definen a Adolfo Enríquez como "el cura de los pobres". El actual párroco recuerda que un mes después de la muerte de su predecesor, lo visitó una persona que solía ir a pedirle dinero todos los meses para solucionar sus problemas, y le dijo: "No te voy a dar nada, hasta que sepa por qué ha sido esto de Don Adolfo". Y el que estaba pidiendo ayuda le replicó: "Vaya por Dios, Don Antonio, así que nos matan al cura de los pobres y usted tampoco quiere ayudarnos".
Réplica
El actual párroco de Vilanova ofrece 9.000 euros a la persona que facilite datos certeros que permitan recuperar la imagen de la Virxe do Cristal, la misma cantidad que tiene previsto destinar para hacer una réplica en un taller de orfebrería de Ourense -del que se niega a facilitar el nombre, hasta ver la acogida que tiene por parte de los vecinos, para que no dañe su reputación-, con vidrio sintético, para que no funda el metal que se introduce en su interior.
"Si alguien me da la imagen auténtica de la Virxe do Cristal, yo me comprometo a pagarle lo que vale hacer una nueva, que son unos 9.000 euros, aún no lo sé exacto", indica el actual párroco de Vilanova dos Infantes. Y admite que si eso llega a ocurrir, habrá "una gran celebración y lágrimas, pero en esta ocasión serían de alegría".
El actual párroco de Vilanova advierte a los autores de la terrible muerte de Adolfo Enríquez que ese daño "ya no lo pueden reparar", pero todavía están a tiempo de devolver la imagen a su parroquia o dar pistas sobre el lugar en el que se encuentra, acción que compensaría con los 9.000 euros que vale hacer una réplica.
Antonio Gómez Rojo alberga muy pocas esperanzas de que se pueda recuperar la imagen de la Virxe do Cristal. "Si alguien la tiene a conciencia, no permitirá que se vea, para no delatarse", afirma. También cabe la posibilidad de que intenten destruirla, para vender la plata que tiene en su entorno -con una parte dorada-, a pesar de que el valor del material "sería muy bajo".
La imagen de la Virxe do Cristal cuenta con un gran valor histórico, artístico, patrimonial y religioso. Para los no creyentes, se trata de "un objeto insólita", por meter en el año 1650, cuando la técnica era muy rudimentaria, una imagen de doble cara en un cristal auténtico de cinco centímetros. Sin embargo, el actual párroco de Vilanova ha llamado a orfebres de Toledo y Milán para que hicieran una réplica, y a pesar de todo lo que ha avanzado la técnica "reconocen que no pueden hacerla". Por lo que ha pedido que la hagan en cristal sintético, en un taller de Ourense. Espera tenerla disponible para la celebración de la novena de O Cristal.
La Virxe do Cristal cuenta con dos celebraciones, el denominado "O Cristal Pequeno", el 25 de marzo, día de la Anunciación, y "O Cristal Maior", el 15 de septiembre, día de la Virgen de los Dolores.
