| Activistas de Stop-Desafiuzamentos de Ourense se concentraron ayer frente a la sucursal de Bankia de Xoán XXIII para reclamar una solución ante el expediente de embargo iniciado contra una mujer que contrajo una deuda de 7.000 euros pero que, asegura la asociación, "ahora puede pagar pero no se le permite". La protesta reclamó el derecho a la vivienda.