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La víctima de una paliza reconoce que la droga hallada en su casa era para traficar

Jose Almeida se conforma con 3 años y 10.300 euros -Hace una semana, en el juicio a sus dos agresores, afirmó que la cocaína la habían traído ellos

Hace una semana, en el juicio a los dos individuos acusados de atarlo, darle una paliza y robarlo en su casa, Jose Almeida Dasilva, portugués de 65 años, dijo que la droga hallada en la vivienda la había traído uno de ellos para ofrecérsela. Ayer, cambiado el rol de testigo al de acusado, este sexagenario de nacionalidad portuguesa admitió que traficaba. Se conformó con una pena de 3 años de prisión más multa de 10.300 euros, después de que la fiscal introdujera una atenuante por toxicomanía.

Sus dos presuntos agresores, dos hombres de nacionalidad dominicana, también cambiaban de papel ayer. Después de enfrentarse hace una semana a un interrogatorio como acusados de cuatro presuntos delitos -robo con violencia, lesiones, tenencia ilícita de armas y de moneda falsificada- Joselo S. R. P. y Reynaldo B. L. estaban citados a declarar como testigos. Su participación no fue necesaria. El juicio no se celebró una vez que el acusado expresó su conformidad con los argumentos de la Fiscalía.

Los hechos se precipitaron la noche del 8 de noviembre de 2014 en un piso de la calle Coruña de Ourense. Eran aproximadamente las 23 horas cuando un vecino escuchó gritos de auxilio y llamó a la Policía. A los agentes les extrañó el desorden del domicilio y, sobre todo, el "grito sordo y prolongado" de una persona que pedía auxilio desde el interior.

Encontraron al portugués maniatado. Cayeron Joselo S. R. P. y Reynaldo B. L., los dos de nacionalidad dominicana, que se enfrentan a 13 y 14 años de prisión, a la espera de sentencia. El último fue condenado en firme en 2008 por una muerte violenta cometida tres años antes. Mató a estacazos a un italiano cuando salía de la vivienda de su expareja. El tribunal le impuso 10 años y 4 meses por un delito de homicidio y por otro de robo con fuerza. Acababa de salir de la cárcel cuando participó en el asalto de Ourense.

Después de que la Policía descubriera el robo a la víctima y también acusado, localizó en una calle de las proximidades el vehículo en el que se habían desplazado desde Lugo, un Peugeot 307 propiedad de Joselo S. R. P. Había 68.550 euros en billetes falsos. Al parecer, querían pagar las sustancias a la víctima con un billete falso.

En su juicio, hace una semana, alegaron que pretendían llevarse el arma -y otra automática incautada que les supone el delito de tenencia ilegal-, así como dinero y la droga, a modo de compensación -querían vender en el mercado negro- tras haberse visto encañonados por el traficante. Las lesiones sufridas por el presunto traficante, y acreditadas por el médico forense, se habrían producido durante el forcejeo, según los individuos.

Con la conformidad del "camello" se considera probado que cuando los dominicanos estaban en el domicilio de Jose Almeida., "se origina entre los tres unas desavenencias, razón por la cual, los dos primeros llevan a cabo una acción contra el acusado, llegándole amordazar y tomar distintas sustancias que aquel tenía en su domicilio al objeto de destinarlas a su venta , así como una pistola de fogueo ,haciéndole entrega en contraprestación de un billete de curso no legal".

Según las conclusiones de la causa contra los agresores, se abalanzaron sobre el sexagenario, intentando taparle la boca con una tela. El luso logró zafarse y comenzó a gritar pidiendo auxilio. Entonces los golpearon violentamente, con patadas y puñetazos por todo el cuerpo. Presuntamente lo arrojaron al suelo, lo ataron de pies y manos, lo amordazaron y lo llevaron a rastras a su dormitorio

Con la víctima inmovilizada y sin poder hablar, los acusados buscaron supuestamente el botín: una pistola detonadora marca "Blow" 8 mm, 49 cartuchos de dicho calibre, 500 euros en billetes de curso legal, varias joyas así como tres bolsas plásticas que contenían cocaína con un peso total de 110,767 gramos. Todo fue intervenido por la Policía Nacional. En un registro posterior se encontraron objetos que evidenciaban que la víctima traficara, como sustancias supuestamente destinadas al corte, básculas de precisión o recortes de plástico. A Jose Almeida le constaban 26 detenciones anteriores a este caso.

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