Una negociación complicada se le presenta al gobierno popular para poder sacar adelante la nueva ordenanza de veladores en suelo público, las conocidas como terrazas, como ya le sucedió al anterior ejecutivo socialista, que también gobernaba en minoría y no fue capaz de conseguir los apoyos necesarios. El nuevo documento presentado está recibiendo alegaciones que pueden frenar su aprobación a corto plazo.
En este sentido, el edil de Ourense en Común, Miguel Doval, aseguró ayer que una de las principales exigencias que plantean es que se acabe con "la invasión" de terrazas en varios enclaves de la ciudad, y señalaba lo que sucede en las pequeñas calles del casco histórico, sobre todo en la conocida como zona de vinos.
Si anteriormente se insistió en rebajar las conocidas como zonas saturadas de terrazas, con el nuevo documento de la ordenanza municipal que se le entregó a los grupos de la oposición todo indica que pocas cosas cambiaron, por lo que no se le da cumplida respuesta a un problema que es una de las cuestiones en la que insisten los ciudadanos, como así se lo habrían trasladado al grupo de Ourense en Común en las asambleas que celebraron sobre la normativa.
Y aunque está pendiente de entregar el texto definitivo de alegaciones a la concejal de Comercio, Ana Fernández Morenza, desde OUC se incide en que el resumen que se hace después del estudio del documento entregado es la "excesiva ocupación" del espacio público, que llega a ser "una usurpación del mismo",
También se plantea la necesaria colaboración de los ciudadanos para denunciar "las ilegalidades" de los establecimientos hosteleros en el "abuso" de instalación de terrazas, para de esa forma "evitar que paguen justos por pecadores", como comentó algún propietario.
Este llamamiento a la ciudadanía para colaborar en aquellos "abusos" de proliferación de terrazas que se plantea por parte de OUC tiene como justificación lo expuesto por el representante del sindicato de la Policía Local, en el sentido de la "falta de medios humanos" para poder controlar todas las calles, así como lo que consideran "escasas restricciones" que impone la normativa municipal sobre ruidos.
Distancias
Lo que también contrastaron los ediles de Ourense en Común, por lo que así le trasladaron los colectivos vecinales, es lo que califican como "excesivas e irrespetuosas" muchas de las terrazas que no cumplen las distancias establecidas respecto al mobiliario urbano público, como pueden ser los bancos o los portales.
Para incidir también en el régimen sancionador, que entienden que se debe variar la propuesta presentada en el documento, debido a que queda "a una interpretación muy abierta", con lo que eso supone, además de las "discrecionalidad" sobre lo que consideran "casos especiales", ya que no se concretan.
Otra de las cuestiones que formarán parte de las alegaciones que presenta OUC están directamente vinculadas a las aportaciones que les trasladó la Federación Discafis Cogami, por considerar la ordenanza transversal en la inclusión de las personas con discapacidades, en particular, y las personas con movilidad reducida.
En este sentido, trasladan que la nueva ordenanza de veladores y terrazas que se pretende aprobar tiene "lagunas" en lo que se refiere a las distancias, pasos libres de obstáculos y ausencia de desniveles, con lo que se dificulta la movilidad de estas personas.
Por lo que al gobierno popular solo le queda esperar la postura que adopte el grupo socialista sobre un documento con muchas similitudes al que no se logró consesuar a finales del pasado mandato y paralizó la nueva ordenanza.
