No es una cifra alarmante, porque en los periodos festivos el porcentaje suele ser mayor que el promedio del resto del año, pero lo cierto es que en los días de Entroido el tanto por ciento de positivos registrados en los controles de alcoholemia triplicó la media de la demarcación de Ourense. Según el dato de la Dirección General de Tráfico, solo un 1,1% de los conductores que realizan el test de alcohol -más de 150.000 trámites en un año- supera el nivel máximo permitido. En la campaña intensiva de controles con motivo del Entroido, los agentes de la Guardia Civil detectaron 83 positivos de un total de 2.576 pruebas de alcoholemia realizadas. Un 3,2 % se excedió.

Muy superior fue el índice de conductores parados que había consumido algún tipo de sustancia estupefaciente. En seis días de controles en los epicentros del Entroido Ourense, con operativos fijos en la zonas de Verín, Laza o Xinzo y también vigilancia especial en Sarreaus, Vilariño de Conso o Viana, -desde el Jueves de comadres al Martes de Entroido-, los agentes del instituto armado hicieron la prueba a un total de 51 automovilistas. Veintidós dieron resultado positivo, el 43,1 %. Si el laboratorio y las alegaciones confirman el resultado, perderán 6 puntos del carné y serán sancionados con 1.000 euros.

Menos controles que en 2015

La campaña especial del Entroido de este año se cerró con muchos menos controles que en 2015. Entonces, en la provincia de Ourense se realizaron 6.160 pruebas de alcohol, con resultado de 109 positivas (el 1,76 %) y 130 pruebas de drogas con 44 positivas (33,8 %).

Se mantiene al alza la tendencia de positivos en alcohol y drogas. Pero según explica el alférez de la Guardia Civil de Tráfico, Juan Carlos Nogueiras, salvo "casos muy llamativos de positivos en alcohol y todos los tipos de drogas", así como "5 o 6" conductores que incurrieron en delito por el exceso de bebida, "por regla general la tasas detectadas dentro de los positivos fueron muy inferiores a otros años".

"Hemos percibido la gran cantidad de transporte público que se ha utilizado, tanto autobuses como taxis, así como la figura del conductor que no bebe en un grupo de amigos. También, de madres y padres que han ido a buscar a sus hijos para que no condujeran después de la fiesta. Creo que la ciudadanía ha percibido claramente que alguien que haya bebido o tomado drogas no puede coger el coche. El mensaje está calando en la sociedad", ve en positivo. Un hecho para el optimismo es que a pesar de la gran cantidad de desplazamientos no se registró ni un solo accidente en los puntos neurálgicos del Entroido, esos 6 días.

Agentes de refuerzo de Coruña

La Guardia Civil de Tráfico de Ourense tuvo apoyos extra para afrontar la campaña de controles. Quince efectivos del Sector de Tráfico de A Coruña fueron enviados para reforzar el contingente. También estuvo presente, visitando e inspeccionando las zonas de los controles, el teniente coronel Francisco Javier Molano, el máximo responsable en Galicia de la Guardia Civil de Tráfico.