La Comisión de Seguimiento y Control del Agua de Punxín, que por acuerdo plenario se acordó crear el año pasado, solo estará conformada por los representantes de los grupos políticos, con derecho a voz y voto, y en la que no tendrá cabida la nueva Asociación vecinal del agua. En la pasada sesión plenaria, celebrada el día 28, se aprobó reformar su reglamento, eliminando su artículo 3, que hacía referencia a la participación como parte de la antigua Comisión del Agua de Punxín, ya extinta. Una decisión que se tomó tras recibir el informe jurídico de la Diputación de Ourense, a petición de Cambio Inteligente, quien alegaba que la nueva agrupación que preside Juan Lage no tenía voz ni voto.
El informe jurídico "nos da la razón", dice Joaquín Moldes, de CI, quien recuerda que precisamente esta Comisión de Seguimiento y Control del Agua se creó por iniciativa de este grupo político con la enmienda del PSOE que pedía la representación de la primera Comisión del Agua de Punxín, y cuyo vigor Moldes puso en duda en dicho pleno ante la enmienda socialista.
Así, la última sesión plenaria de Punxín aprobó por unanimidad retirar el artículo 3 del reglamento, no obstante, "eso no quita que otra asociación pueda presentar alegaciones, tendrá voz, pero no voto".
Mientras tanto, el Concello de Punxín está a la espera de que se resuelva la solicitud de energía eléctrica y se constituya el Consorcio de Concellos beneficiarios del proyecto de Bombeo del río Miño, Cenlle, San Amaro y Punxín, para poder poner en funcionamiento la nueva red de agua, lo que podría tardar unos dos o tres meses. Mientras tanto, CI pidió en ruegos y preguntas que en caso de emergencia social, por contaminación, por ejemplo, este Concello se pueda conectar de inmediato a la red.
También se aprobó por unanimidad facultar al alcalde para dirigirse a los otros concellos de la comarca, para que no se pierdan más servicios ferroviarios en la Estación de O Carballiño.
