La cabeza de lista de Nós-Candidatuta Galega (integrada por BNG, CG, FOGA, PCPG y PG) fue la quinta fuerza más votada en Ourense, con 6.372 votos, pero se quedó muy lejos de esa ansiada representación en Madrid. "Hicimos todo lo posible, a sabiendas de que no estábamos en el contexto más favorecedor para nuestra candidatura y no pudo ser; lamentamos que no haya una voz nacionalista en el Congreso; eso es malo para Galicia", señala Noa Presas.
En esa caída continuada del nacionalismo, ajena a la valía de sus líderes, el nacionalista ha perdido estos comicios 12.682 sufragios en la provincia de Ourense, si se comparan los 6.372 del domingo con los 19.054 obtenidos por el BNG en 2011.
Sus votos, sin embargo, sumados a los de otras formaciones como En Marea-Anova-Podemos-EU podrían incluso haber arañado mejores resultados en una hipotética candidatura unitaria de la izquierda.
Pero para Noa Presas no se puede hablar ni de 6.000 votos perdidos, los suyos, ni del fin del nacionalismo. "Vamos a seguir trabajando, pues esto no es el fin; tenemos todas las puertas abiertas al diálogo, pero cuando se hizo el proceso de conformación conjunta, uno de los criterios que defendimos es que no queríamos la injerencia de fuerzas estatales", explica.
En aquel momento no pudo ser, "pero el hecho de que las fuerzas de izquierda pudieran sentarse ya fue visto como algo positivo".
Finalmente, el presentarse aparte, como fuerza nacionalista, fue "una decisión de la militancia, pero ya dijimos que vamos a hacer autocrítica para ver qué ha podido influir en los resultados y qué cuestiones tienen que ver con errores que el nacionalismo a lo mejor debe corregir".
Contentos por la caída del PP
Por lo demás, en el análisis global de resultados "vemos absolutamente positiva la pérdida de escaños del PP, porque demuestra un importante cambio de tendencia en general en Galicia y en Ourense", explica Noa Presas, quien durante la campaña, junto con el amplio programa de reformas en todos los ámbitos, denunció el contexto caciquil provincial.
