-La provincia muestra índices preocupantes, como la falta de empleo, la caída de la población y el envejecimiento.

-El PP lo tiene claro. Hay que partir de algo básico, que es la creación de empleo. Si creamos empleo, mejoramos la economía, la gente se puede quedar en el territorio, con lo que se incrementa la natalidad. Todo está vinculado. En los dos últimos años, el PP creó medio millón de puestos de trabajo cada doce meses, y el compromiso es llegar a los 20 millones en el 2020: dos millones en los próximos cuatro años.

-Ourense necesita discriminación positiva.

-La Galicia del interior necesita un trato especial, para que podamos explotar nuestras potencialidades.

Cuáles son los puntos fuertes de la provincia de Ourense?

-El 80% de la provincia es superficie agrícola, por lo tanto tenemos que trabajar en esa materia. El PP lleva respuestas a todo eso en el programa, para que el rural siga teniendo fuerza. Tenemos una campaña a nivel nacional denominada "Mi pueblo no se cierra". Hay que seguir potenciando el sector agrario, para fijar la población.

-El sector vitivinícola tiene grandes retos.

-Ourense cuenta con cuatro de las cinco denominaciones de origen gallegas. Esa es una riqueza tremenda, porque al final estamos trabajando en cuatro territorios distintos: Ribeira Sacra, Valdeorras, Monterrei y O Ribeiro. Está claro que hay que apostar por la internacionalización, para incrementar nuestra presencia en el exterior.

-¿El termalismo es otra gran oportunidad?

-El PP tiene un compromiso muy grande con el termalismo. Esta semana estuvo la secretaria general de turismo, en un encuentro que tuvo con el sector en Laias. Tenemos que seguir potenciando los grandes balnearios y apostando por el turismo de salud, que es una vía de negocio muy importante para el sector y para Ourense.