Maside aprobó en pleno, por unanimidad, los presupuestos para 2016, por más de 1.800.000 euros euros, un convenio relativo a recogida de basura en colaboración con los concellos de Punxín (este ayuntamiento aprobó ese mismo día en pleno repetir con la Diputación) y Piñor (que sí repite con Maside), e instar a la Xunta a que nuevamente incorpore a sus prepuestos los 4.000.000 de euros que en su día se destinaron a la construcción de unas viviendas para el colectivo de gitanos de A Fontela.
El PP llevó al pleno tres mociones. Una era referente al asentamiento de A Fontela, cuya población vive en condiciones cada vez más deplorables. Según el PP, con el paso del tiempo aumentan las "viviendas creciendo el riesgo de enfermedades, la aparición de alimañas y crece la acumulación residuos, además de la imagen de desidia que ofrece por parte del Concello de Maside". Una preocupación que fue también compartida por el resto de la corporación que votó a favor de esta moción.
El PP presentó otras dos mociones. Una relativa al alumbrado público de la carretera de San Amaro, entrada a Maside desde la auto vía, que "lamentablemente pierde la casi totalidad de la iluminación de las farolas cuando los árboles que adornan este lugar lucen su pleno follaje". Por este motivo, solicitó que aprovechando la época de tala, se haga un rebaje o traslado de las farolas.
Con motivo de esta solicitud, la corporación acordó retomar la continuación de un antiguo proyecto de la Diputación en el que se contemplaba ademáis de la modificación del alumbrado público, la construcción de aceras.
La segunda moción era relativa al mal estado generalizado de los contenedores de basura en todo el Concello. El alcalde, Celso Fernández, "aseguró que están en óptimas condiciones por lo que rechazó nuestra propuesta de lavarlos de manera trimestral alegando que no era factible, y también rechazó la posibilidad de fabricar para estos una plataforma o base en el suelo con el objetivo de evitar que los contenedores ocupen un espacio reservado".
El PP lamenta que también rechazó su propuesta de convocar un concurso en colaboración con los escolares del Concello, para la decoración de dichos contenedores. En cambio, sí se aprobó la prohibición de pegar cualquier elemento publicitario en ellos.
