Desde la Xunta se había puesto a disposición de los empresarios a finales del pasado año una rebaja del precio de venta del suelo industrial de hasta el 50%, en especial en polígonos de la provincia de Ourense, la que que se estaba viendo más afectada por el éxodo poblacional y de empresas buscando precios más competitivos en el norte de Portugal. Pero la propia Xunta reconoció que no se había obtenido la respuesta esperada.

El suelo a la venta a un precio un 50% más barato está en los polígonos de O Barco de Valdeorras (62.113 metros cuadrados), O Carballiño (29.803), Celanova (3.418), Pereiro de Aguiar (32.689); Ribadavia 1 (7.481), Ribadavia 2 (32.683), Vilamarín (32.683), Xinzo (16.084) y Central de Transportes de San Cibrao (84.820).

Esta drástica reducción aprobada por el Ejecutivo gallego es una de las 60 medidas con las que prevé mejorar la empleabilidad y la generación de negocio en Galicia.

El propio presidente de la Federación Gallega de Inmobiliarias, Benito Iglesias, señaló que es el caso de los polígonos del norte de Portugal, catalizador, desde que empezó la crisis, de muchas empresas que se fueron para esos polígonos limítrofes pero con precios mucho más competitivos, "lo que ha provocado que el 95% de las firmas instaladas en el parque de Valença sean gallegas", declaró entonces Adeido.