Es una necesidad y a la vez una asignatura pendiente a la que el gobierno municipal pretende dar respuesta antes de concluya el año. Se trata de la nueva ordenanza municipal de veladores y terrazas, debido a que la está en vigor se quedó "obsoleta", sobre todo en relación a la situación actual.

Después de que el anterior gobierno socialista fracasase en sendos intentos, al no contar con los apoyos necesarios por parte de los grupos políticos para sacar adelante el documento elaborado, que en estos momentos está en proceso de modificación, la prioridad es contar con una normativa que tenga en cuenta las necesidades reales, tanto del sector de hostelería, pero respetando los derechos de los ciudadanos ya que se ubican en suelo público.

En este sentido, la necesidad de llegar a un consenso, debido a que el gobierno municipal del Partido Popular no cuenta con la mayoría, está demorando su aprobación, así como la necesidad de tener en cuenta planteamientos que se plasmaron en las alegaciones presentadas. Uno de los principales problemas que existen es el cumplimiento de la actual normativa, sobre todo en lo que se refiere al número de terrazas, y que llevaron a que por parte del Concello se llegase a "requisar" muchas de las que se habían colocado sin la correspondiente autorización.