Durante las últimas décadas ha aumentado considerablemente la esperanza de vida de las personas mayores. Muchas de estas personas tienen dificultades para satisfacer de manera independiente las actividades de la vida diaria, pasando a depender de terceras personas, consolidándose así la figura del cuidador no profesional. Teniendo en cuenta que en casi la totalidad de los casos la persona que adquiere el rol de cuidador principal carece de conocimientos previos, Cruz Roja Ourense ofrece un espacio de descanso y respiro, además de formación y apoyo, desde el proyecto de "Apoyo temporal a familias con personas mayores a cargo".

Desde el pasado mes de agosto, voluntariado de Cruz Roja en Ourense acude a los domicilios de estas familias, donde les enseñan algunas nociones básicas para mover a las personas que cuidan.