El Concello de Boborás, que dirige Cipriano Caamaño, optó por no renovar el acuerdo con la empresa concesionaria del servicio de abastecimiento y saneamiento de agua que se venció el día 5. Decidió asumir su titularidad aprovechando los convenios firmados con la Diputación, para una gestión conjunta mientras no decide que hacer con este servicio.

Agotada la prórroga de un año tras un convenio de 10 años con Geseco, ahora será el Concello quien gestione el servicio, según el alcalde, con la colaboración de la Diputación. Y mientras tanto se da este trabajo conjunto, Caamaño dice que el ayuntamiento hará un estudio, y "con datos se verá cuán es la mejor opción para los vecinos", si una gestión privada, municipal, o cederla al ente provincial.

Asimismo, explica que la empresa cobrará su servicio hasta el día 5 y a partir de ahí lo que pase del trimestre de la facturación redundará en el Concello. La oficina que tiene Geseco en Almuzara, a la que acudían muchos vecinos a pagar, dice que supone que permanecerá hasta que cobre lo que tiene pendiente.

Y ante la preocupación de algunos vecinos en saber a dónde tendrán que ir a pagar los siguientes recibos, el regidor deduce que le llegará a sus casas alguna notificación informándoles si en el propio ayuntamiento o en una cuenta en una entidad bancaria. Algo que dice no sabe aún como se solucionará pero que tan pronto se sepa se informará a todos los usuarios.

Caamaño también está a la espera de lo que le informen los técnicos de la Diputación sobre la lectura de los contadores.

Así, dice que la titularidad del servicio ahora es municipal pero que se prestará con el apoyo de la Diputación a través de los convenios firmados.