Con la unanimidad de los cuatro grupos que conforman la Corporación Provincial se aprobó en el pleno de ayer la iniciativa conjunta presentada por DO y PSOE para crear una comisión que investigue el brote de legionela que afectó a dos trabajadores de la empresa adjudicataria del servicio municipal de Limpieza, el primero el 27 de agosto, y el segundo el 22 de octubre pasado.
Un acuerdo de los cuatro grupo que no evitó cruces de reproches entre el portavoz del gobierno y edil de Limpieza, José Araújo, con el portavoz socialista y anterior responsable de esa área, Vázquez Barquero, tanto en lo que se refiere a lo sucedido en el brote de legionela como en lo relacionado con la adjudicación del servicio que llevó a cabo el gobierno del PSOE.
Y si la oposición centró sus argumentos para reclamar la creación de la comisión de investigación en la "ocultación" de información del brote de legionela, que para Vázquez Barquero "no tiene una explicación normal, por más que se empeñe" el responsable del área de Limpieza, Araújo justificaba que el grupo popular "tiene la obligación de gobernar y no alarmar" , y explicar que cuando se detectó la empresa "nos dijo que era un caso puntual", aunque luego se produjo un segundo.
Para dejar claro que "apoyamos la comisión para trabajar en lo que sea necesario", y pedir disculpas "por si alguna vez se me calienta la boca", en alusión a determinadas declaraciones realizadas sobre está cuestión hacia el PSOE, que "nunca fueron en el plano personal a su portavoz", aclaró.
Pero según avanzó el debate, al portavoz del gobierno se le "calentó la boca" de nuevo después de determinadas acusaciones vertidas por Vázquez Barquero, en el sentido de que deberá asumir responsabilidades por todo lo sucedido y, sobre todo, por no facilitar información a los grupos de la oposición durante tres semanas de un asunto "muy grave".
Esto llevó a que Araújo, después de explicar que las competencias de Sanidad las tiene la Xunta y no el Concello, reconociendo el buen trabajo realizado, advirtió a Vázquez Barquero que el gobierno puede auditar y realizar un seguimiento, pero "no entrar en el funcionamiento de la empresa como se hacía antes, en el anterior gobierno socialista".
Pero fue a más, y el edil de Limpieza lanzó tres dardos especialmente críticos: "nosotros no nombramos gerentes -en alusión al primero que tuvo la adjudicataria, una etapa de lo más convulsa que llevó a una huelga general por el despido de una trabajadora-, ni fuimos los que adjudicamos la concesión del servicio de Limpieza".
Además de la referencia a como "se ganaron muchas asambleas locales del PSOE", en la que participaron muchos trabajadores de la empresa, lo que molestó a Vázquez Barquero y a la edil Carmen Rodríguez, que sigue siendo la secretaria local, que no dudo en lanzar la amenaza de "ya veremos que consecuencia tiene".
Al final, la edil de DO, María Teresa Rodríguez, incidió en que la empresa no llevó a cabo las medidas correctas, a lo que Araújo dijo que si fue así "deberá responder por ello".
