La política de Personal en el Concello mantiene su alto grado de polémica, sobre todo después de que el gobierno popular procediese adjudicar dos puestos de inspectores vigilantes de Limpieza a través de una comisión de valoración, y que para los representantes sindicales tiene un objetivo claro: "que se queden los mismos que estaban", con lo que entienden que "se sigue la línea del anterior ejecutivo socialista".
Después de constatar en el tablón de anuncios del concello todo el proceso seguido, el presidente de la Junta de Personal, Daniel Salgado, asegura que es una situación que provoca el "rechazo" de la mayoría de los empleados públicos, ante lo que califican de "trato discriminatorio", así como la "flagrante vulneración" de los principios de mérito, igualad y publicidad para la cobertura de estos puestos.
Las criticas las dirigen hacia la responsable de Personal, Flora Moure, así como al responsable del área de Medio Ambiente y Limpieza, José Araújo, por consideran que dieron cobertura a un proceso que consideran a todas luces "rechazable", además de abundar en determinados aspectos del mismo, con especial referencia a los criterios de valoración.
En este sentido, y según refleja el acta de la comisión de valoración, "solo se tendrán en cuenta aquellas actividades formativas impartidas por administraciones públicas o centros de formación acreditados...", mientras que "no serán valoradas aquellas titulaciones que sean requisito indispensable para el acceso a la condición de funcionario", así como las "titulaciones o actividades formativas que no tengan una relación directa y especifica con esas funciones".
Para el presidente de la Junta de Personal está muy claro: "querían colocar a dos personas concretas", y señala que venían ejerciendo esas competencias, las de inspectores vigilantes de Limpieza, sin la correspondiente cobertura legal, por lo que no descarta que todo el proceso termina, como otros muchos, en la vía judicial.
Sostiene Salgado que los pocos trabajadores que se presentan a este tipo de "pantomima" -comisión de valoración-, acaban "desmotivados y frustrados" al ver que su formación y antigüedad "no se valoran de una manera objetiva". De ahí que piden al alcalde, Jesús Vázquez, así como a la edil de Personal, Flora Moure, que "pongan fin a estas malas prácticas" llevadas a cabo en la política por parte del anterior gobierno socialista.
Y alerta de que entre los puestos cubiertos en comisiones de servicio, que según los datos que se manejan desde la Junta de Personal son 113, y los puestos singularizados, en total 387, de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), además del actual organigrama del Concello, provocan una situación "caótica" en la gestión e los recursos humanos.
En lo que también incide Salgado es que en relación a los puestos ocupados en comisión de servicios, los puestos de origen están también dotados presupuestariamente, lo que provoca un incremento en el capitulo 1 de Personal de esos presupuestos. Por lo que insiste en que la solución pasa por una "revisión en profundidad" de la RPT, una nueva reestructuración de servios y un concurso de traslados, en el que prime la igualdad, mérito, capacidad y publicidad del mismo.
