Acudieron a la casa de un octogenario en la localidad ourensana de Lobeira con la primera intención de venderle una manta pero se aprovecharon, sin escrúpulos, al observar el mal estado de salud del propietario, un hombre de 87 años de edad con problemas cognitivos, desnutrido y deshidratado; con nulas condiciones para poder defenderse de dos delincuentes. Un matrimonio de nacionalidad portuguesa aceptó ayer un acuerdo de conformidad que les rebaja la condena a 2 años de prisión.

Es una buena salida a los 4 años y medio a los que se exponían en caso de que no hubiera pacto entre la defensa y la Fiscalía. Con todo, la magistrada del Penal Número Dos de Ourense tendrá que decidir ahora si suspende el cumplimiento de la condena o, pese ser menor a 2 años, decreta igualmente el ingreso en prisión de los acusados por la naturaleza de los hechos.

Sucedió la mañana del 3 de diciembre de 2011. La víctima tenía 87 años. Falleció hace unos meses, tal y como confirmaron ayer fuentes del caso. A las 11.30 horas de aquel día se presentaron en su casa Joao Joaquim Gama, de 53 años, y su pareja María Julia Trinidade Rasquilho, de 57, vendedores a domicilio.

Tal y como se considera probado, porque ambos reconocen los hechos, el matrimonio entabló en un primer intento una conversación con el octogenario para intentar venderle una manta. Cuando vieron que se trataba de una persona de avanzada edad y, además, con una salud débil, una vida en soledad y un trastorno cognitivo, los portugueses decidieron aprovecharse de la situación de inferioridad de la víctima para apoderarse del dinero que tuviera en su poder.

Dinero oculto entre la ropa

Con ese propósito, los dos acusados, de complexión fuerte, sujetaron cada uno por un brazo al anciano, quien apenas fue capaz de oponer resistencia. A continuación, y mientras la mujer sujetaba fuertemente al octogenario por la muñeca de la mano derecha, su marido subió al primer piso de la vivienda de Lobeira. Tras registrarla en su totalidad cogió 927 euros que se encontraban ocultos entre ropa vieja y en el interior de un monedero. Los dos delincuentes se dieron a la fuga en una furgoneta de color verde y con matrícula portuguesa.

Como consecuencia de estos hechos, la víctima sufrió una contusión en la mano derecha que tardó en curar una semana. La condena de conformidad considera a la pareja de portugueses autores de un delito de robo con violencia en las personas, con la agravante de abuso de superioridad.