La UNED Sénior arrancó ayer sus clases con una doble dosis de motivación. Por un lado, el centro asociado de Ourense se estrena este curso como foro de formación para los mayores de 55 años que demandan conocimiento pero también un espacio de encuentro y socialización y, por otro, batiendo récord de matriculación en su primer año de implantación. El secretario del centro y profesor, Julio Prada, aseguró ayer que el elevado nivel de participación fue "toda una sorpresa" para el equipo, que recibió personalmente la felicitación de la secretaria general de la UNED, Beatriz Badorrey, que el miércoles presidió en Ourense la inauguración oficial del curso ordinario. "Lo normal es que en ciudades como esta el primer año de funcionamiento no se superen los 30 matriculados", afirmó Prada.
Una de las claves de este éxito, explica el secretario, es el diseño flexible que ofrece la UNED y que, en parte, está facilitada por la sede central. De esta forma, se ofertaron un total de 24 materias en fase de preinscripción y fueron los propios alumnos, con su demanda, los que marcaron la selección de las ocho que finalmente se imparten. "Iban a ser seis pero eran tantos que tuvimos que ampliar", apunta Prada. La docencia se imparte lunes y jueves, en el centro cultural de 16,30 a 20,30 horas, distribuida en dos cuatrimestres con cuatro materias cada uno. Esta experiencia, explica Julio Prada, es "muy enriquecedora" para el alumno pero también para los docentes porque los mayores "tienen mucho que aportar". De hecho, en las clases "sénior" se rompe el esquema tradicional y no hay barrera entre alumnos y profesores. "Muchas veces son ellos los que marcan el ritmo de la clase", apunta.
