El Concello de Ourense podrá ejecutar todos los proyectos contemplados en el plan de inversiones, aprobado a finales de 2014 al contar con el apoyo de la Diputación, que permite desbloquear algo más de 1,3 millones de euros destinados a obras, el 27,8% del total de los 4,8 millones de euros aprobados a través de una modificación presupuestaria, ante el riesgo real de que no se pudiesen realizar antes del plazo establecido, el 31 de diciembre de este año.
El acuerdo se daba a conocer al término de la reunión entre el presidente de la Diputación, Manuel Baltar, y el alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, en el marco de los encuentros previstos del Comité de Cooperación Permanente, y en el que también participaron el vicepresidente segundo del organismo provincial y edil de Promoción Económica, Jorge Pumar, y las ediles de Hacienda, Ana Fernández Morenza, y la de Personal, Flora Moure, junto a técnicos de ambas administraciones.
La situación era límite, como reconocía el alcalde, debido a la imposibilidad de poder ejecutar todas las obras que están pendientes, algunas de ellas, como la de la calle Concejo, con un presupuesto que ronda los 80.000 euros, y proceder a su pago antes de que acabe el año. De ahí que por parte del Concello se recurriese a la Diputación para buscar un "recoveco legal" y poder llevarlas a cabo, y que se concretó con un acuerdo de colaboración, como permite la Ley de Régimen Local, dentro de los Planes de Cooperación, tanto técnica como económica, que por parte de la institución provincial será de 100.000 euros.
Ineficacia en la gestión
El alcalde quiso aclarar todo lo que pasó con el plan de inversiones, sobre todo después de la controversia suscitada con el grupo socialista, y recalca que el pedir el apoyo a la Diputación se debe a la "ineficacia" del Concello desde la aprobación, del que es responsable el anterior gobierno socialista.
Y sin entrar en confrontación directa con los socialistas, y asumir el compromiso de facilitar todos los datos relacionados con el plan de inversiones elaborados por los técnicos, el alcalde asegura que la situación del plan "cuando llegamos al gobierno, hace poco más de tres meses, era de total abandono".
Además, sostiene Vázquez que los proyectos estaban "paralizados", en gran medida por la situación de la propia Concejalía de Infraestructuras, afectada por la división interna del gobierno socialista, al pasar de ser responsabilidad del crítico Rodríguez Penín, posteriormente "laminado" por el exalcalde Agustín Fernández, el breve paso de Áurea Soto, hasta su imputación judicial y apertura de juicio oral acusada de prevaricación, hasta Juana Ageitos, que en la actualidad es edil socialista en la oposición.
Y aunque por parte del gobierno popular se marcó como una de las principales actuaciones de gestión agilizar toda la tramitación, la "imposibilidad de cumplir los plazos nos llevó a tener que acudir a la Diputación", señala Jesús Vázquez, que agradecía la disposición del presidente provincial, Manuel Baltar, para colaborar y, sobre todo, contribuir a que esos proyectos, "muy beneficiosos para la ciudad", se puedan ejecutar.
Sobre esta cuestión, el presidente del organismo provincial deja claro que después de analizar la situación, una vez se pidió por parte del alcalde de Ourense "nuestro apoyo", el acuerdo adoptado "era la única posibilidad para poder ejecutar las obras". De ahí que, en esa línea de dar una respuesta rápida y eficaz, Manuel Baltar anunció que el acuerdo se llevará al pleno de octubre para su aprobación, al contar el PP con mayoría.
En este sentido, y ante las críticas que puedan surgir por parte de los grupos de la oposición, Baltar esgrime como argumento de actuación el "apoyo leal" de la Diputación a "quien lo solicita", y proclamar que "se atiende a los 92 concellos de la provincia, entre los que se encuentra el de la capital, al que tenemos que apoyar, y con el que debemos colaborar". Es por eso que , como no podía ser de otra forma, "se atendió esa petición de auxilio realizada por el Concello de Ourense".
