La Fiscalía Provincial pide una condena de 4 años y 8 meses de cárcel para F. P. L., un acusado de tres delitos machistas que será juzgado en Ourense. La víctima fue la mujer con la que mantuvo una relación de convivencia durante dos años, residiendo primero en el domicilio de los padres y después en otro piso.

Según el ministerio público, el imputado humilló a la mujer. Presuntamente le profería insultos por no ocuparse de las tareas domésticas y le pedía explicaciones sobre las personas con las que había quedado. Sostiene la Fiscalía que el acusado controlaba los horarios y no la dejaba salir con sus amigos. También se molestaba, supuestamente, si visitaba a su familia, a los que llamaba "el enemigo".

El relato de hechos de cargo contra el imputado añade que el hombre también intimidaba a la víctima, diciéndole que si lo dejaba se quedaría con su gato y lo dejaría morir de hambre.

Presuntamente, también la amenazó de muerte, advirtiéndole que si tenía relaciones con otro hombre la mataría. El simple hecho de que le dirigiera la palabra a otro varón le molestaba.

Las acusaciones no se quedan ahí. Según la Fiscalía, el presunto maltratador propinó a la mujer empujones, agarrones fuertes por los brazos, pellizcos y también hizo ademán de golpearla levantando la mano a escasos centímetros de su cara.

El 28 de diciembre de 2013, según detalla la acusación pública, F. P. L. comenzó a discutir con su pareja porque no quería que fuera a comer a casa de sus parientes. La mujer insistió en ir y el presunto agresor le dio un bofetón.

Dos días más tarde, la víctima se marchó del domicilio de sus padres y sobre las 6,30 horas del día siguiente, el acusado se presentó en la casa familiar y presuntamente los amenazó.

Investigan quebrantamiento

La Fiscalía imputa tres delitos distintos al presunto maltratador. Además de la pena de prisión que solicita, de casi 5 años entre rejas, el ministerio público ve indicios de que el hombre quebrantó la medida cautelar de alejamiento, por lo que pide que se investigue. En caso de condena, F. P. L. no podrá comunicarse ni acercarse a su expareja durante cerca de una década.