Los problemas del Concello de Ourense con el pago de facturas pendientes a proveedores es una de las cuestiones prioritarias para la concejal de Hacienda, Ana Fernández Morenza, y es por eso que "estamos intentando agilizar el proceso para cumplir lo que establece la ley", de ahí que nada más llegar el nuevo gobierno popular se procediese a presentar una modificación de crédito y poder abonar algo más de un millón de euros.
En este sentido, y después de conocerse el informe del Ministerio de Hacienda sobre está situación en los Concello, que coloca al de Ourense como uno de los que más tarde en pagar a sus proveedores, Fernández Morenza señala que un informe de Tesorería "nos advertía de esa situación", en el sentido de que se "incumplía" lo que establece la le, de pagar en 30 días.
La responsable del área Económica del Concello señala como una de las causas la caducidad de varias concesiones de servicios municipales, que se realizan en precario, y cuyas facturas son reparadas por la Intervención. Además de señalar que algunas de las facturas que presentan empresas que prestan el servicio "no están correctas".
Una situación que provocó los primeros enfrentamientos entre el gobierno popular y grupo socialista, sobre todo en lo que se refiere a la deuda que estaba pendiente de pago, en lo que a facturas se refiere,.
La realidad es que la prioridad en estos momentos pasa por "mejorar el sistema", y de esa forma cumplir con las dos premisas fundamentales: "cumplir con lo que establece la ley en cuanto al pago, y que cobre los proveedores del Concello".
Uno de los ejemplos palmarios de la situación en la que se encuentra el Concello el nuevo gobierno, por lo que entienden "dejadez" de sus antecesores, es lo relacionado con servicios básico, al dejar caducar los contratos que existían sin renovar el proceso, como la compra de gasoil.
Lo que no descartan es que pueda haber "más facturas en los cajones", como se advierte desde el gobierno municipal, y que llevarían a una nueva modificación presupuestaria, de lo contrario se deberán incluir en los presupuestos para 2016 que intentarán aprobar antes de finales de año.
