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César Enríquez: "Es difícil llegar a Obama, pero le dejé un libro para que vea Ourense y su Ribeira Sacra"

El bodeguero ourensano asistió a la gala hispana de Washington, donde su vino es uno de los habituales en la mesa del presidente

César, en primer término, el pasado día 8 durante la intervención de Obama en Washington. // FdV

Desde hace tres años, el vino "Peza do Rei" producido en la Adega Cachín de la D.O. Ribeira Sacra, en el concello ourensano de A Teixeira, es uno de los escogidos para estar en la mesa del presidente Obama, durante los brindis de la fiesta de la comunidad hispana que se celebra en Washington

Este año además del ya emblemático vino, llegó a Washington para participar en esa 38 Gala Anual de Premios del Caucus Hispano, donde se dan cita la elite de la política y la empresa del mundo hispano en USA, como uno de los invitados de honor de los organizadores el propietario de Adega Cachin, César Enríquez para vivir una experiencia que fue, señaló "casi como tocar el cielo".

No logró esta foto personal con el presidente Obama "porque es muy difícil llegar a él, el protocolo es bastante estricto y la seguridad que rodea al presidente es enorme" explica. "Fíjese que estuvimos con un puertorriqueño que lleva seis años trabajando en el equipo del presidente, y dice que solo lo ha visto de cerca dos veces" . Pero César es gallego y al final de la gala, llegó al menos "a extender mi mano por encima de la multitud y él me la estrechó y me respondió con un n "ok" momento que el viticultor muestra en un vídeo.

Pero el autor de esos vinos que tanto han gustado al presidente, sí consiguió dejar al remate de la gala, un libro a Obama, "para que conozca Ourense y la Ribeira Sacra", explica César, la provincia que produce uno de los vinos que ha encandilado a los expertos norteamericanos que han podido degustarlo. "Los miembros del equipo del presidente me dijeron que le harán entrega del libro, y recibiré en breve una carta suya para agradecérmelo".

Pero para César Enríquez y su esposa, que regresaron ayer a España después de cinco días de un intenso calendario de viaje por Estado Unidos, el premio a la entregada labor que hace el bodeguero en su plantación de 8 hectáreas de viñedos, ya está cumplido.

"La gala fue el pasado día 8, y antes de entrar al acto estuvimos en una zona "bussines" en la que solo había 90 personas y estaban miembros del congreso, ministros como el de Vivienda y nuestro vino estaba ya compartiendo cartel con otros, en la mesa en especial vinos de California" afirma.

Reconoce con humildad que "está claro que no se bebe solo "Peza do Rei" en la gala del mundo hispano; la cultura vinícola en aquel país es más limitada, si fuera como en Galicia y España en general, nos "beberían", bromea el viticultor "pues no daríamos abasto para poder abastecer a aquel país".

El sueño americano de César, al que él nunca había aspirado, pues "lo único que pretendí siempre fue solo hacer un buen vino", reconoce, le llegó también de la mano de toda una celebridad en Estados Unidos, el chef español José Andrés, afincado en aquel y que fue galardonado además en esta 38 Gala Anual de Premios del Caucus Hispanos por su contribución a la comunidad latina, premio que recibió de manos de la propia Hillary Clinton precandidata del partido demócrata a la presidencia de Estados Unidos.

"Primero llegó a la Ribeira Sacra un importador americano, que se quedó sorprendido de la belleza de los cañones del Sil y por nuestro "Peza do Rei" que de ahí llegó a José Andrés "que ha tenido mucho que ver en que el vino llegar a la mesa de Obama", explica el viticultor. Ahora mismo este vino de la Ribeira Sacra ourensana, exporta a varios países del mundo. "Acabamos de entrar en Japón y vamos a comenzar en el mercado chino, pero nuestra prioridad es la calidad".

De hecho de las 8 hectáreas que cultiva Enríquez en la Ribeira Sacra, solo 6 son para "Peza do Rei", pues "lo que nos preocupa no es aprovechar el momento y disparar la producción, sino esmerarnos aún más, mejorar el diseño de la botella y si cabe subir un poquito el precio, pues "non se pode traballar solo para quecer" bromea César. Ahora está a 5 el joven y 10 euros la botella de barrica. Obama no se quejará del precio.

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