Cabaret, pipetas, plumas y flecos se dieron ayer cita en el Xardín do Posío para recrear "la década de mayor efervescencia cultural en la ciudad", explicaban desde la organización de "A Bela Auria", una fiesta de recreación histórica en la que el tiempo retrocede hasta los locos y felices años 20 y que ya va por su sexta edición.

"Si otros años los asistentes apostaban más por el estilo tradicional de vestimenta de esta década en Ourense, el calor que ha venido ha hecho triunfar al estilo cabaret por goleada", explicaba Óscar Penín, uno de los miembros de la organización.

Penín cifraba la asistencia, sumando todas las actividades que había preparadas, más de quince horas de programación cultural, en cerca de 3.000 personas. "La fiesta se mantiene e incluso ha crecido", explicaba. Sobre todo en los talleres dedicados a los más pequeños sobre el patrimonio de la ciudad: "Creemos que es un síntoma claro de que hay carencias en este tipo de actividades". Un grupo de docentes descubrían a los niños y no tan niños, los secretos escondidos de la historia de la ciudad: "Hay elementos obvios como la catedral que todo el mundo conoce, y otros que todavía permanecen enterrados en la memoria y en el terreno como el Castelo Ramiro o el Castro de Oira", indicaba Óscar Penín.

"Se trata de proponer actividades para que el público conozca la ciudad en la que vive", indicaban desde la organización una idea que se complementaba con el evento que se encargó de inaugurar esta jornada festiva: una bicicletada por el centro de la ciudad con los edificios de arquitectura modernistas como parada obligada.

Tras la ruta, la fiesta se instaló en el Xardín do Posío donde las diferentes asociaciones culturales de la ciudad compartieron una jornada de convivencia en la que no faltaron juegos populares para la tarde, y cine o música para la sesión nocturna que se celebró en la Praza de San Marcial.

Una fiesta que "sigue sorprendiendo, por ofrecer tantas actividades de manera gratuita", afirmaba Óscar Penín y por el gran esfuerzo que supone para esta asociación "tan pequeña y con tan pocos medios", reconocían.