El Consejo de Ministros autorizó ayer la contratación de las reservas del programa termalismo saludable del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) para 2016 y 2017 por 72,4 millones de euros, 36,2 millones para cada año. De este modo, se modifican los límites establecidos con cargo al crédito "Envejecimiento Activo y Prevención de la Dependencia" para posibilitar la ejecución de 88 expedientes. Tal y como adelantaba el pasado jueves el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, en la inauguración de la edición número dieciséis de la feria internacional Termatalia en Expourense.

Con este crédito se consolida el programa de termalismo saludable para los próximos ejercicios. En este programa participan 106 balnearios de 13 comunidades autónomas, es decir, la mayoría de los que hay en España.

Los programas de termalismo saludable ofrecerán entre 214.000 y 215.000 plazas cada año para los usuarios interesados. El objetivo es mejorar la salud de las personas mayores al acceder, a unos precios reducidos, a curas termales en los balnearios, ya que fomentan un envejecimiento más activo y saludable.

Además, los programas favorecen el mantenimiento y creación de empleo en este sector, pues permiten a los establecimientos tener ocupadas las plazas durante la temporada baja. Este año, el programa ha favorecido la generación o mantenimiento de un total de 3.005 empleos directos.

Ahora una vez aprobada la partida económica, el próximo viernes tocará fijar las condiciones de los contratos con los establecimientos termales, con idea de que puedan empezar a tramitarse las plazas en noviembre. Según explicó Alfonso Alonso en la inauguración de Termatalia, los 36 millones que destina el Imserso a estos programas tienen un impacto económico de 123 millones en España. Respecto a Galicia, recordó que son 20 los establecimientos termales que participan con un total de 25.449 plazas y anunció que en 2016 se verán incrementadas en 2.200 más. Otra de las novedades de la próxima edición, además de un menor coste, es la incorporación de nuevos destinatarios de este programa como los viudos a partir de 55 años, los no pensionistas mayores de 65 y los desempleados a partir de 60.

Alonso defendió en Expourense que "el termalismo es salud", por lo que los establecimientos balnearios se han convertido en "aliados" del sistema público de sanidad. De hecho, el ministro reveló que un estudio realizado por su departamento constata que los pacientes con problemas de articulaciones y otras patologías similares que realizan tratamientos termales reducen en un 39% el gasto en medicamentos durante los seis meses siguientes.